Piden aumentar pena contra ex capitán del Costa Concordia

ROMA, ITALIA (21/SEP/2015).- La fiscalía de la ciudad italiana de Grosseto impugnó hoy la sentencia a la que fue sentenciado en primera instancia el ex comandante del crucero Costa Concordia, Franccesco Schettino, al considerar que la misma no refleja su "responsabilidad titánica" en el naufragio del 13 de enero de 2012.
 
Los fiscales Maria Navarro, Stefano Pizza y Alessandro Leopizzi presentaron un recurso con el que pretenden que sea aumentada la pena carcelaria contra Schettino, acusado de homicidio culposo múltiple, naufragio y abandono de la nave por la tragedia en la que murieron 32 personas.
 
Según los fiscales, el ex capitán del Costa Concordia debe recibir una "pena ejemplar" que sea congruente con su responsabilidad en el hundimiento del barco frente a la isla italiana del Giglio.
 
El pasado 11 de febrero el Tribunal de Grosseto condenó a Schettino a 16 años de cárcel, frente a los 26 solicitados por la fiscalía.
 
Hasta el momento el ex capitán no ha pisado la prisión porque los jueces consideraron que no existe peligro de fuga y aun no ha sido pronunciada la sentencia definitiva, que correspondería a la Corte Suprema.
 
Para llegar a la condena de 16 años de cárcel el Tribunal sumó cinco años por el delito de desastre culposo, 10 por el de homicidio múltiple culposo y un año por abandono de personas menores o incapaces, pues escapó del barco cuando aun había a bordo cientos de pasajeros.
 
Otro mes de cárcel le fue acumulado por no haber informado correctamente a la capitanería de puerto tras el choque del crucero contra los escollos de la isla del Giglio, ocurrido porque la nave se acercó demasiado a tierra.
 
La Corte no reconoció, en cambio, el agravante de naufragio culposo, ni tampoco el agravante de culpa consciente por los homicidios múltiples culposos.
 
Tanto Schettino como la sociedad Costa Crociere, propietaria del barco, fueron condenados a pagar indemnizaciones por 300 mil euros a algunos ministerios, al servicio de protección civil, al gobierno de la región de Toscana y al municipio de la isla del Giglio.
 
Asimismo, deben resarcir a algunos supervivientes, entre ellos la bailarina moldava Domnica Cemortan, presunta amante de Schettino y que la noche del desastre lo acompañaba en la cabina de comando.