LAUSANA, SUIZA (15/OCT/2016).- La conferencia sobre Siria en la que participaron Washington, Moscú y los actores clave en el conflicto finalizó el sábado por la noche en Lausana sin avances concretos, mientras la guerra continuaba sin descanso.Los participantes en la reunión, la mitad, defensores del régimen de Damasco y la otra mitad, de la rebelión siria, se levantaron de la mesa tras poco más de cuatro horas de negociaciones en un hotel de la ciudad suiza, tras haber acordado "prolongar los contactos", según el ministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergei Lavrov, citado por las agencias de prensa rusas."Hemos dicho claramente que hay que empezar el proceso político lo más rápidamente posible", agregó.Su homólogo estadounidense, John Kerry, indicó que se habían intercambiado "ideas nuevas" durante la reunión. Sin embargo, mencionó "la tensión" y los "cruces directos pero sin rencor" que se produjeron durante el encuentro.Los otros participantes, Turquía, Catar y Arabia Saudí -que apoyan la rebelión-, Iraq, Egipto e Irán, aliados del régimen de Damasco, no hicieron declaraciones.La reunión, que presentaba un formato nuevo (los países europeos no fueron invitados) estuvo precedida por una reunión entre John Kerry y Sergei Lavrov, que no se habían vuelto a ver desde que comenzara la ofensiva rusosiria, hace tres semanas, en Alepo (norte).Los barrios del este de esta ciudad, controlados por los rebeldes, siguen bajo una lluvia de fuego, sobre todo los de Hanano, al Maysar e Inzarat, según el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH). Llevan así desde el 22 de septiembre.En otro frente, los combatientes de la oposición siria, apoyados por Turquía, avanzaban el sábado hacia la ciudad de Dabiq, situada entre Alepo y la frontera turca, para arrebatársela a los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI), anunció el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.Turquía lanzó el 24 de agosto una ofensiva sin precedente en Siria, llamada "Escudo del Éufrates", para expulsar de la frontera a los yihadistas del EI y a los rebeldes kurdos sirios de las Unidades de Protección del Pueblo Kurdo (YPG).- De reunión en reunión-Antes incluso de que comenzara, los participantes no escondían que no tenían grandes expectativas puestas en la reunión.El encuentro se produjo en un contexto extremadamente tenso entre Moscú y los países occidentales, que acusan a Rusia de haber cometido "crímenes de guerra" en Alepo.Moscú y Washington han negociado durante casi un año sobre Siria en varias reuniones y han impulsado dos acuerdos de alto el fuego en 2016 que sólo duraron unos cuantos días o, en el mejor de los casos, algunas semanas.Los pactos fracasaron por los diferentes intereses que convergen en este conflicto extremadamente complejo, donde se hallan implicados una decena de países.Desde que la tregua se rompiera a finales de septiembre y comenzara la ofensiva contra la parte de la ciudad en poder de los insurgentes, donde viven unos 260 mil habitantes, han muerto más de 370 personas, en su inmensa mayoría civiles, según el OSDH. Entre las víctimas figuran más de 130 niños, según la oenegé Save the Children.El régimen de Damasco y su aliado ruso aseguran que bombardean Alepo para eliminar a los "terroristas".Hace un par de días, Moscú propuso que los rebeldes salieran de la ciudad, garantizándoles su seguridad. Por su parte, la ONU planteó un plan para que salieran los combatientes de Fatah al Sham (ex Frente Al Nusra, rama siria de Al Qaida) de los que, se calcula, habría menos de un millar.Pero tanto la oposición como sus apoyos temen que, con el pretexto de evacuar a los combatientes, el régimen y Rusia sólo busquen una rendición forzada de Alepo.El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, acudirá el domingo a Londres para asistir a una reunión ministerial de países "afines", es decir, en la que participarán únicamente los apoyos de la rebelión, principalmente europeos.Desde marzo de 2011, el conflicto en Siria ha provocado la muerte de más de 300 mil personas y ha dejado millones de desplazados y refugiados.