Viernes, 26 de Julio 2024
Entretenimiento | Por: Guillermo Vaidovits

Kinetoscopio

Fortuna accidental

Por: EL INFORMADOR

Escena de la cinta Red social. EL UNIVERSAL  /

Escena de la cinta Red social. EL UNIVERSAL /

GUADALAJARA, JALISCO (12/DIC/2010).- Red social es la dramatización de personajes y sucesos reales. Podemos asumir que se trata de seres y asuntos cuya existencia histórica es comprobable, sin embargo por la manera en que son representados lo que queda claro es que más bien son figuras bastante convencionales de la imaginación.

El protagonista es un joven universitario arrogante que tiene la función de encarnar una versión contemporánea del mito del creador genial que inventa cosas a base de sentimientos frustrados y borracheras. Tras una cita desastrosa en la que acaba rechazado por la chica de sus sueños, nuestro héroe bebe una botella de cerveza tras otra, mientras elabora en el lapso de unas cuantas horas un sistema que permite comparar retratos de mujeres, mismo que, en cuanto lo pone en internet, capta felizmente la atención de la comunidad estudiantil de Harvard y satura el tráfico de datos de su red de computo. El director considera apasionante mostrar ese arrebato creativo como una sucesión de imágenes de manos accionando el teclado, del rostro del actor, y de la pantalla de la computadora. Faena a la que recurre de tanto en tanto para describir el diseño de Facebook y su vertiginosa prosperidad; y que resulta lo más cercano a la noción de suspenso o acción emocionante que se puede ver en la película. Otro momento consabido exhibe el fastidio que sufre una mente inspirada ante el despliegue de inteligencias menos sagaces. Durante una clase el profesor plantea un problema peliagudo. Los alumnos escuchan concentrados. Al protagonista le llega un papelito con un insulto. Disgustado se pone de pie y se dirige a la puerta. El profesor lo observa irse y, sarcástico, le reprocha que se rinda ante el problema. Sin detenerse, él suelta al aire la respuesta correcta y sale del aula. El catedrático, por supuesto, balbucea impresionado. El resto de la trama alterna la descripción del nacimiento y evolución del sitio web de moda, y los alegatos judiciales que se desataron por la propiedad, y los beneficios económicos del mismo. En la conclusión, guionista y realizador quieren hacerla de Orson Welles del siglo XXI incluyendo, como en El ciudadano Kane, un elemento que enlaza el inicio y el final de modo esclarecedor, ofreciendo así la posibilidad de una explicación psicológica a todo los trabajos y esfuerzos del personaje central. Y como podrá imaginarse -en una película que trata sobre la convivencia con las computadoras- lo hacen mostrando por enésima vez un rostro que mira, y luego una pantalla.

Temas

Lee También

Recibe las últimas noticias en tu e-mail

Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día

Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones