Helicóptero-limosina, un lujo jalisciense

GUADALAJARA, JALISCO (25/MAR/2011).- Tiene hélice, pero no vuela. Cuatro llantas sostienen el cuerpo de una limosina en forma de helicóptero. Son cerca de las 9:00 horas y una manta negra evita descubrirlo.

Y es que después de cuatro meses de trabajo vale la pena mantener la expectativa, o al menos eso parece pensar Martín Vaca López, director general de la empresa jalisciense Vaca Limo, que se dedica a la construcción, venta y renta de limosinas. Hace 58 años que su padre, Martín Vaca Sánchez, inició el negocio del cual ahora él lleva la batuta.

Es justamente a Vaca Sánchez a quien va dedicado el nuevo vehículo. Pero no conforme, la familia procedió a brindarle un homenaje con la develación de una placa.

La señora María del Socorro López de Vaca es la encargada de jalar la tela, que poco a poco va desvistiendo una cola larga y firme, una hélice grande y cristales grandes y polarizados, rodeados de un color verde militar que confirma lo imponente de vehículo.

El interior no es menos sorprendente. De no ser por las luces azules que simulan un antro, el lugar estaría oscuro, y no habría manera de ver el espacio acondicionado para el bar. Una pantalla que presume imágenes de otra nave de lujo forma parte del helicóptero-limosina.

Tal fue el éxito, que la unidad presentada ya tiene otros dueños; incluso, en cuatro meses deben de tener construida otra que tendrá como destino el Estado de México.

Los datos: Cuesta la opulencia

Precio: 600 mil pesos

Renta: Alrededor de ocho mil pesos por cuatro horas

Capacidad: 15 personas

Tiempo de construcción: Cuatro meses (Sobre pedido)

Material: Fabricado con materiales reciclados

EL INFORMADOR/ROBERTO MEDINA