Viernes, 26 de Julio 2024
Economía | A pesar de que el consumo anual en México es de 470 mililitros per cápita, con 4 millones 790 mil cajas en 2006, los segmentos mujeres y jóvenes son los impulsos que dan un respiro a una industria.

El vino conquista a las mujeres

Un estudio de mercado realizado por la Asociación Nacional de Vitivinicultores revela que en los últimos seis meses de 2006 las mujeres (madres de familia) consumieron 23% del total de los vinos mientras que los varones (jefes de casa) ingirieron 52%.

Por: EL INFORMADOR

MÉXICO.- El ascenso de la mujer al mundo laboral y el protocolo en las comidas y cenas de negocios, así como sus nuevos gustos, ha propiciado su acelerada incursión en el mundo del vino.
Desde hace poco más de una década, a ejecutivas, empresarias, gerentes y demás profesionistas se les ve participativas en catas, seminarios de vino y muy interesadas en temas de maridaje, lo que favorece que el mercado nacional registre un crecimiento de 12% y la expectativa para los próximos años es que mantenga ese ritmo.
A pesar de que el consumo anual en México es de 470 mililitros per cápita, con 4 millones 790 mil cajas en 2006, los segmentos mujeres y jóvenes son los impulsos que dan un respiro a una industria.
Un estudio de mercado realizado por la Asociación Nacional de Vitivinicultores revela que en los últimos seis meses de 2006 las mujeres (madres de familia) consumieron 23% del total de los vinos mientras que los varones (jefes de casa) ingirieron 52%.
El análisis ubica en 10% el consumo de hijos y amigos, rubro que incluye a los jóvenes de ambos sexos; sin embargo, la ingesta en reuniones con familiares y amigos sigue a la cabeza con 57%, mientras que las comidas captan 16%, las fiestas 2%, 8% las cenas.
Daniel Loeza, vicepresidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), explica que en los últimos cuatro años es muy notorio que las mujeres “no sólo ingieran vino, también reconocen entre una cosecha joven, de crianza o de reserva”. Detalla que en reuniones de trabajo suelen “medir” su ingesta y no exceder las tres copas, en tanto, los caballeros acostumbran tomar cuatro “tragos” y en reuniones de trabajo o con socios toman más.
No obstante, cuando algunas de esas mismas féminas acuden a un restaurante por motivos de celebración ingieren hasta una botella de vino de mesa, es decir, siete copas.
Otro factor que influye para que el vino esté en boca de todas son sus bondades antioxidantes. Según estudios científicos el consumo responsable previene el envejecimiento cutáneo y mantiene la lozanía de la piel. A esto se añade la tendencia cosmética de la vinoterapia de moda en destinos turísticos como Los Cabos y Puerto Vallarta.

EL INFORMADOR / MOM / 08-03-08





 

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