Un “loco” acaba la fiesta rojinegra

Hubo llanto y una tristeza desbordada que se transformó en gritos de apoyo para Atlas, tras quedar eliminados de la Copa Libertadores a manos de un “loco”, ese mismo que en otro tiempo Adolfo Bautista, sacó de quicio en su propia tierra.

Y es que a Martín Palermo, le dicen el “loco”, pero en realidad es el tipo más cuerdo que tiene Boca Juniors dentro del área, quien al lado del talentoso Juan Román Riquelme, abrieron el arco del Atlas para llenarlo con tres balones que el arquero Rodrigo Bava no pudo detener, la defensa tampoco.

Por la personalidad que maneja Palermo deja sólo dos opciones: se le quiere o se le odia. En Atlas lo odian. Pero es innegable que la efectividad que tiene ante el marco rival, es mortal y ayer terminó con la fiesta rojinegra de tres goles letales.

Eso sí, el apoyo de la Barra 51 nunca faltó, pese a estar 3-0 abajo en el marcador, siempre alentaron a los suyos, incluso cuanto terminó el encuentro, despidieron a su equipo entre aplausos y porras, que iban acompañadas de lágrimas, porque se les fue la ilusión de lograr un campeonato.

El “loco” de la noche: Palermo, salió en silencio, no habló con los medios de comunicación, pero una vez que se subió al autobús, la alegría le ganó y se le veía sonriente por los tres goles anotados y porque Boca está en las semifinales de la Libertadores 2008.