Sneijder, tras los pasos de Cruyff

JOHANNESBURGO, SUDÁFRICA (05/JUL/2010).- Nacidos en la misma academia del Ajax de Ámsterdam, Wesley Sneijder va tras los pasos de la leyenda holandesa Johan Cruyff, ídolo de la “Oranje”, que lamenta ser un rey sin corona por no ganar un título mundial, algo que el actual astro holandés quiere mejorar.

“Podemos ser campeones”, disparó confiado el centrocampista ofensivo del Inter de Milán, autor de cuatro goles en Sudáfrica 2010, incluido el doblete con que eliminó a Brasil (2-1) en los cuartos de final.

“Es un sentimiento fantástico haber eliminado a uno de los más grandes y mejores equipos” del Mundial, afirmó Sneijder, de 26 años.

El ex jugador Real Madrid ha vivido una temporada de ensueño en San Siro, ganando tres títulos con el conjunto nerazzurro y ahora va en busca del trébol de la suerte en el primer Mundial de la historia en África.

De paso, quiere regalarle el primer título mundial a Holanda, que a su vez le ayudaría a heredar el Balón de Oro 2010 europeo de manos de Leo Messi, tras ganar la Liga de Campeones, la Serie A italiana y la Copa de Italia.

Uruguay, la siguiente aduana

El primer peldaño a trepar será derrotar a Uruguay en semifinales, mañana en Ciudad del Cabo, para igualar la barrera de Cruyff, finalista en Alemania 1974 con el nacimiento del “futbol total”.

En aquella oportunidad, Cruyff se había disfrazado de verdugo de los brasileños, al derrotarlos 2-0 con un autogol incluido, en el último partido de una Liguilla de segunda ronda que definía el pase a la final con los germanos.

Con físicos diferentes y un andar distinto por el campo, Sneijder creció mirando videos de su espejo Cruyff, de sus proezas con la “Oranje” y también en el Barcelona, aunque cuando se mudó del Amsterdam Arena, tras seis años en Ajax, eligió el Real Madrid en vez del gigante catalán que también le había echado un ojo.

Curiosamente, Cruyff, especialmente influyente en el Camp Nou, le había bajado el pulgar. “No es un jugador para el Barcelona”, dijo en febrero de 2007, poco antes de que la Casa Blanca lanzara sus redes hacia la nueva joya holandesa.

Muchos especialistas, incluido Cruyff, apuntaban a Messi, Kaká, Cristiano Ronaldo o Wayne Rooney, entre los hombres a pelear por la corona de Maradona.

Gullit dijo hace meses que el mejor jugador de Sudáfrica sería Sneijder

Otro histórico de la “Naranja Mecánica”, Ruud Gullit, comandante en la conquista de la Eurocopa 1988 junto a Marco van Basten, único título de fuste de la “Oranje” hasta ahora, anticipó lo de Sneijder.

“El mejor jugador del Mundial no será Cristiano Ronaldo, ni Lionel Messi. Será Wesley Sneijder”, dijo el embajador de la candidatura conjunta de su país y Bélgica para la organización de la Copa del Mundo de 2018 o 2022, de 47 años.

“El juego en sí mismo de Holanda es su punto fuerte. El estilo de sus pases cortos y los grandes jugadores que tiene en ataque pueden ser dos factores que la llevan hacia una gran actuación”, dijo el Balón de Oro de 1987.

Con cuatro goles y dos asistencias en el Mundial, Sneijder acapara ya la atención del Grupo Técnico de Estudios de la FIFA, que podría nombrarlo mejor jugador del torneo si continúa por este camino, tras los pasos de un tal Johan Cruyff.

El enemigo a vencer para Holanda es ella misma

A un partido de la final de la Copa del Mundo, los holandeses cruzan dedos para que su tristemente célebre tendencia de inmolarse en las instancias decisivas no vuelva a aparecer.

Después de cinco victorias consecutivas, incluyendo un memorable triunfo 2-1 ante Brasil en los cuartos de final, Holanda se presenta como la gran favorita para deshacerse de Uruguay en Ciudad del Cabo el martes.

Pero el equipo ni siquiera ha alcanzado su mejor versión, y el técnico Bert van Marwijk evocó el domingo el pecado holandés de creerse triunfadores antes de tiempo.

“Lo hemos visto en el pasado”, dijo. “Fue lo que nos ocurrió hace dos en Austria y Suiza. Le ganamos a Italia y Francia y todo el mundo creyó que ya éramos los campeones de Europa.

“Pero ni siquiera pasamos de los cuartos porque creíamos que todo estaba cocinado. Eso es lo que he tratado de poner énfasis, que esta vez será diferente. Hasta ahora, los jugadores han demostrado que han asimilado ese concepto bastante bien, pero ahora se viene otra prueba importante”.

Holanda recibió varias buenas noticias

Su delantero Robin van Persie podrá jugar ante Uruguay, luego que una ecografía mostró que un golpe en el codo izquierdo no era tan grave como en principio se temió.

No hay nadie más en enfermería, luego que el defensor Joris Mathijsen recibió el visto bueno tras una dolencia en la rodilla. Las bajas obligadas corresponden al volante Nigel de Jong y al defensor Gregory van der Wiel, ambos por suspensión.

Esas noticias le permiten a Van Marwijk mantener su costumbre de no hacer cambios a equipo que gana.

Impresionante racha

Holanda lleva 24 partidos sin perder, racha que empezó a enhebrar desde una derrota como local 2-1 ante Australia, en un amistoso disputado en septiembre de 2008. Esa derrota se produjo cuando quedaron con 10 hombres durante todo el segundo tiempo por la expulsión del arquero Maarten Stekelenburg.

Pero el futbol mostrado en Sudáfrica no ha sido el del tipo sinfónico que suele verse con la “Oranje”.

Lo prioritario para van Marwijk es asegurarse que sus jugadores no menosprecien a nadie, en este caso Uruguay.

Holanda se ha ganado una reputación de equipo incapaz de mantenerse fuerte de principio a fin en los torneos. Perdieron dos finales sucesivas de los mundiales en los 70, una década en la que revolucionaron el futbol. Su único título importante fue el de la Eurocopa de 1988.

Ahora tienen una oportunidad inmejorable de volver a una finalísima al enfrentarse con una Uruguay que realmente no se perfila para llegar tan lejos. La Celeste se clasificó a la semifinal tras vencer por penales a Ghana.

Y ahora mismo estarían en casa de no haber sido por el penal que el delantero ghanés Asamoah Gyan estrelló en el travesaño en la agonía del alargue.

Para saber

Van Marwijk calificó a Uruguay como un equipo de “luchadores” y “sobrevivientes”, virtudes que no suelen asociarse con Holanda, que suele caer presa de la desesperación cuando las cosas no le salen.