La segunda pamplonada resultó limpia y rápida

Pamplona, Esp.- En un tiempo de dos minutos y 22 segundos, se llevó a cabo este segundo encierro, en el que corrieron cinco astados negros y uno cárdeno, con un peso de entre 520 y 585 kilogramos.

La ganadería de Cebada Gabo lleva 23 años participando en los encierros de Pamplona, en este lapso de tiempo, sus toros han cornado a 37 mozos, lo que la convierte en la divisa con el récord de cornadas durante estas fiestas.

Sin embargo, no haciendo gala a su fama, el encierro de hoy transcurrió con relativa tranquilidad. Durante el recorrido de aproximadamente 850 metros, tuvieron caídas algunos mozos que sufrieron diversas contusiones.

En la cuesta de Santo Domingo se vivieron los momentos de mayor peligrosidad, ya que los morlacos lanzaron brutales embestidas contra algunos mozos que se apretaban contra las paredes de la cuesta para protegerse.

El ganadero, propietario de esta divisa, José Javier García Cebada, se mostró satisfecho con la carrera, la cual calificó como limpia y rápida.

El Servicio Navarro de Salud, en un informe preliminar, reportó que esta mañana se registró un "puntazo" a un mozo en la parte interior de la rodilla, mismo que tuvo lugar en la calle de Mercaderes.

Así mismo, en un primer balance, se reportaron algunas heridas y contusiones, por caídas y golpes, lo cual es habitual en los encierros debido a la velocidad y la masificación de éstos.

Esta tarde, los ejemplares de Cebada Gabo que protagonizaron este encierro, serán lidiados por los diestros Diego Urdiales, Sánchez Vara y Luis Bolívar.