GUADALAJARA, JALISCO (02/NOV/2016).- Chivas llegó al hotel de concentración en Querétaro minutos antes de las cinco de la tarde. Para entonces ya unas cien personas los estaban esperando, entre las cuales destacaron los miembros de La Insurgencia, porra rojiblanca que llevó una manta con la leyenda: "Somos la más grande (afición) de México".En cuanto los jugadores comenzaron a bajar del autobús, aparecieron los cantos de La Insurgencia, con las banderas en todo lo alto, siempre alentando a los suyos para la gran final de la Copa MX ante el Querétaro.El grito de guerra no pudo faltar: ¡Dale!, ¡dale!, ¡dale!, "Rebaño". ¡Dale!, ¡dale!, ¡dale!, "Rebaño", ¡daaaaaleeee! "Rebaño". Así como frases estudiadas de sus clásicas canciones en tribuna como: La vida en la cancha hay que dejar, por Chivas es morir o ganar.La directiva de Querétaro hizo todo lo posible por dejar a la mayor cantidad de aficionados de Chivas fuera del encuentro, al condicionar la venta de boletos, pero algunas de las porras lograron conseguir entradas el domingo pasado, así que el equipo no estará solo, aunque difícilmente serán mayoría, como se acostumbra.EL INFORMADOR / Alejandro Ramírez