Inglaterra conquista a Rusia

MOSCÚ, RUSIA.- No fueron ¨requeridos¨ para la Eurocopa que arranca en unas semanas.

Sin embargo, los ingleses hicieron suya, por méritos propios, esta edición de la final de la Champions League, que por primera vez en la historia se disputará en territorio ruso.

Con Chelsea y Manchester United, flamantes finalistas, media Inglaterra ya se trasladó a Moscú para ser testigo de la primera final de este magno evento que disputarán dos clubes del país británico.

Saben que al no calificar su Selección para la Euro Austria/Suiza 2008, lo más importante para el futbol de su país será el juego de mañana en esta capital.

Y aunque sólo dos o tres días que estén aquí previo al cotejo de mañana, la fiesta está a todo su apogeo.

Muchos seguidores de los Diablos Rojos se han trasladado a la Plaza Roja, donde muy cerca de allí, el ex dirigente soviético, Vladimir Lenin, yace embalsamado en su mausoleo.

Sin embargo es tanta y abrumadora la fiesta, que ¨si Lenin se despierta y la viera, se volvería a morir¨, explicó John Stone, uno de los cientos seguidores al United, que espera que su club sea monarca de Europa por tercera vez en la historia, siguiendo a los títulos de 1968 y 1999.

Los de Manchester United son los más escandalosos

Del Chelsea, que nunca ha ganado esta Liga, se han visto menos, quizá no van a donde se encuentran los del Manchester para evitar confrontaciones, o tal vez lleguen hasta horas antes del partido.

Estos dos clubes ingleses se han caracterizado, a través de la historia, por ser de la clase alta.

Su enfrentamiento no es de los llamados ¨clásicos¨, sin embargo, su rivalidad ha crecido en los últimos años, debido a que desde 2003 que el ruso billonario Roman Abramovich adquirió al equipo azul, sus aspiraciones al título crecieron, lo mismo que su rivalidad con los otros gigantes del futbol inglés, entre ellos el Manchester United.

En lo que inicia la fiesta, mañana miércoles a las 22:45 horas (13:45 tiempo de México), los que se han multiplicado son los  gentes de seguridad y policías que cuidan que los llamados hooligans ingleses hagan de las suyas.

El ambiente, por lo menos hasta ayer, había sido de fiesta, pero en cierta forma tranquilo. Se espera que así siga hasta terminado el encuentro, y que no haya represalias de parte de los seguidores al equipo que resulte derrotado.