El Azteca se volvió a vestir de verde

MÉXICO, D.F.- La catedral del futbol mexicano, el colosal Estadio Azteca de la capital del país, se pintó de verde nuevamente para brindarle todo el apoyo a la Selección mexicana, en la búsqueda de un boleto para el Mundial de Sudáfrica 2010.

La cultura de la camiseta en su máxima expresión, con el verde de la esperanza, se manifestó en los más de 100 mil aficionados que poblaron la tribuna del majestuoso Azteca.

A las dos de la tarde se abrió el cerco perimetral del inmueble para darle la bienvenida a los fans sedientos de un triunfo del representativo nacional.

Para el aficionado común, el arribo al Azteca brinda un sinnúmero de opciones antes de ingresar a la tribuna, que van desde la reventa sin control, hasta las más estrictas medidas de seguridad, pasando por los antojitos mexicanos, bebidas al por mayor, piratería sin control, toda clase de camisetas y souvenirs y una gran cantidad de patrocinadores con atractivos juegos interactivos.

En el río humano que corrió por todos los alrededores del estadio, aparecieron los seguidores venidos de Costa Rica, que en cantidad significativa, se mezclaron con sus camisetas rojas entre el sinnúmero de portadores de la “verde”.

La propuesta de los torcedores “Ticos” fue entusiasta, pero por sobre todo amistosa, y ante esa manifestación foránea, la respuesta de los mexicanos fue acogedora y con frecuencia se mezclaron las camisetas verdes y rojas para tomarse la foto del recuerdo.

Sin que sea el pasaporte de entrada al mundo del futbol, el ponerse la “verde” o la camiseta del equipo favorito, es el distintivo para ingresar al fascinante mundo de las eliminatorias mundialistas que en esta fecha memorable pusieron a gozar y sufrir a todo el orbe.

Ernesto López Mota/Enviado