Deportes | A propósito por Jaime García Elías * “Refuerzos” A propósito por Jaime García Elías Por: EL INFORMADOR 25 de marzo de 2009 - 03:23 hs Efraín Flores fue cesado, finalmente, como timonel del Guadalajara porque una de las leyes no escritas del futbol establece que “Cuando un equipo se muere... el técnico es el culpable”. La vez anterior que Efraín quedó transitoriamente cesante, por voluntad propia, al término del anterior Torneo de Apertura, había a su favor un cierto margen para la duda. El equipo había terminado la fase regular del certamen como líder de la clasificación general... En la “Liguilla”, lamentablemente, en vez de confirmar sus condiciones de aspirante, en un campeonato en que los tradicionales “grandes” dejaron libre el paso al Toluca, el Guadalajara se quedó por debajo de las metas de sus dirigentes y de los anhelos de sus legiones de simpatizantes; para decirlo amablemente, fue incapaz de tener un cierre a la altura de su “arranque de caballo fino”. * Para al actual torneo, a despecho de los problemas --verdaderos algunos, míticos otros-- para reforzarse, se hicieron cinco contrataciones. (Casi medio equipo, en efecto, si todas ellas hubieran ganado plaza de titulares). Lamentablemente, sólo dos de los flamantes refuerzos --“Amaury” Ponce y Aarón Galindo-- han sido integrantes habituales de las alineaciones iniciales... y ninguno de ellos ha tenido hasta ahora el peso específico que se esperaba: Ponce no influye con su toque como lo hacía en el Toluca, y la presencia de Galindo no ha dado solidez al cuadro bajo rayado. (De hecho, uno de los puntos débiles del cuadro ha sido el centro de la zaga). En cuanto a los otros refuerzos, Ochoa tuvo un arranque espectacular --anotó dos goles al Cruz Azul, en la primera jornada--... pero se fue apagando gradualmente hasta cambiar por abucheos las palmas con que lo recibieron los devotos de la causa rojiblanca; Mendoza no ha justificado, en absoluto, su presencia en la nómina, y mucho menos la etiqueta de “refuerzo”; Borgetti sigue dando la razón a quienes temían que ya no le quedara futbol en las piernas para tratar de alargar una carrera que, por razones naturales, se encuentra en el ocaso. * Con un nivel alto en las exigencias de dirigentes y seguidores; con una competencia especialmente difícil para los equipos dueños de historiales respetables, y con un plantel del que los hechos demostraron que no fue debidamente apuntalado, Efraín sólo podía salvarse por una vía inaccesible para el común de los mortales: los milagros. Temas A propósito Jaime García Elías Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones