* “Hay portero”

Víctor Hugo Hernández ya tiene qué contarle a sus nietos: que debutó en un “Clásico”; que entregó virginal el marco..., y que fue --“modestia aparte”, podrá decirles-- factor determinante en la victoria de su equipo --las “Chivas”, nada menos-- sobre el Atlas.

*

Efraín Flores supo jugarla. A partir de la premisa de que “en la guerra, en el amor y en el futbol --sobre todo esto último-- todo se vale”, se la tuvo muy guardadita. Aunque desde mediados de la semana, a raíz de los pecados mortales de Sergio Rodríguez, que se pagaron con la penitencia de los goles y frustraron un mejor resultado para el “Rebaño” en el primer partido de la Copa Sudamericana ante el Atlético Paranaense, dejó correr la noticia de que “deshojaba la margarita” entre removerlo y darle el espaldarazo, a la hora de los mameyes consiguió el 1-0 favorable a su equipo... desde antes del partido.

En efecto: la noticia, que vino a conocerse ya en el Estadio Jalisco, unos minutos antes del Clásico, probablemente influyó en el ánimo de los rojinegros..., pero seguramente lo hizo en el de los rojiblancos. Fue notorio que el bloque defensivo del Guadalajara se vio más ordenado, más aplicado, menos errático que varios de los partidos anteriores, especialmente a partir de que el chamaco debutante en el marco mostraba solvencia desde el primer lance en que intervino.

*

El mensaje para propios y extraños, en las cuatro intervenciones del novel arquero en la primera media hora de partido, fue tan escueto como elocuente: “Aquí hay portero, señores”.

Se presumía que así era. Hugo era ya el segundo portero en la lista, detrás de Michel. Una lesión en un hombro lo hizo perder el lugar en el escalafón, en beneficio de Rodríguez y de Liborio Sánchez. Ya recuperado, todo fue cuestión de porfiar --requisito, ya se sabe, para matar venado--... y de tener paciencia.

Fue una pena que la oportunidad llegara, en buena medida, de la mano de las reiterativas pifias de Sergio: indicios, por cierto, de que éste no estaba tan maduro como se requiere para hacerse cargo de uno de los puestos más delicados en un equipo con exigencias.

*

Ahora falta ver si Hugo tiene la estatura futbolística necesaria para contribuir a que el Guadalajara recupere el terreno perdido en las nueve primeras fechas del certamen.