Presentan el libro 'Amaramara', de Juan Gelman

GUADALAJARA, JALISCO (04/DIC/2014).- "Amaramara", libro de Juan Gelman que fue presentado en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara ( FIL), aborda el tema del amor: el amor con distintos tonos, con transparencia, con reflexión filosófica, con pensamiento musicalizado.

Durante la presentación del libro, dedicado a Mara La Madrid, viuda del poeta, Evodio Escalante dijo que hablar de la poesía de Gelman es una tarea difícil, pues en la prolijidad de su obra se detectan distintas poéticas -de crítica, de protesta, de amor, anterónimos- que juntas se mueven con una tensión infinita.

El escritor dijo que el amor y el dolor se funden en la poesía de Gelman; se entrecruzan, encuentran la manera de alimentarse secretamente. Resaltó que "Amaramara" es un libro de amor ligado al mundo y a todo lo que sucede, "que no es obviamente amoroso, sino es profundamente amoroso".

Jorge Ángel Leyva, editor del libro y amigo de Gelman, dijo que la mayoría de los poemas reunidos en el libro responden a la poética "gelmaniana", a la sintaxis abrupta y a la vez armoniosa que el escritor lograba acomodar a su respiración y a su lectura en voz alta.

"Amaramara es una selección de poemas destinados a mostrarnos que el amor no es un camino de santidad, sino de rebelión, de entrega total a las causas que parecen derrota".

Agregó que el libro es también un diálogo de Gelman con sus seres queridos, con el individuo y con sus seres queridos; con México y con Argentina; con su pasado y con su vida madura.

"La poesía de Gelman es en esencia una poesía amorosa, no en el sentido convencional, edulcorado del término, sino en el sentido de la pasión, de la piedad, de la capacidad de conmoverse ante el otro, los otros. En Juan no hay un yo sin el nosotros".

Jorge Boccanera dijo que Gelman fue un hombre sin alharaca, un intelectual de convicciones firmes que nunca bajó los brazos, un maestro y un compañero, un poeta que siempre fue muy leído y frecuentado por jóvenes que le mostraban sus trabajos y a los que les inyectó influencias liberadoras que los impulsaron a encontrar su propia voz sin recurrir a fórmulas o a dogmas.

Puso de relieve que la voz de Gelman es la voz de la ruptura, porque siguió la línea de los poetas latinoamericanos que lejos de seguir los "ismos" que llegaban de Europa, priorizaron la libertad creativa, legitimaron todas las herramientas y las búsquedas frente a las ortodoxias de los manifiestos.

EL INFORMADOR / GONZALO JÁUREGUI