Piglia destaca ruptura con la poética única en América Latina

Piglia recibe el Rómulo Gallegos
CARACAS, VENEZUELA (02/AGO/2011).- El escritor argentino Ricardo Piglia, quien hoy recibe el XVII Premio Internacional de Literatura Rómulo Gallegos, celebró la ruptura con "la poética única" que predominó en América Latina y destacó que actualmente los escritores están en sincronía con el mundo, sin olvidar la conexión con sus tradiciones.

"Ya no estamos bajo el signo de cierto tipo de poética única, que era la poética que identificaba a los escritores latinoamericanos", declaró Piglia (Argentina, 1941) en una entrevista.

Piglia, quien se alzó con el galardón por su novela negra "Blanco nocturno", aludió así a la visión que marcó la literatura de la región tras el conocido "boom" de la literatura latinoamericana en los años 60 y 70 con autores como Gabriel García Márquez o Mario Vargas Llosa.

"Hoy (Jorge Luis) Borges parece más latinoamericano que García Márquez, o si no queremos hacer una comparación digamos: tan latinoamericano como García Marquez", señaló el autor de otras novelas como "Plata quemada" o "Respiración artificial".

Según Piglia, "los escritores contemporáneos de América Latina están trabajando muy en 'sincro' (sintonía) con lo que se está escribiendo en Nueva York y lo que se está escribiendo en Londres y, a la vez, manteniendo siempre una conexión con su propia tradición".

En relación con esta nueva corriente literaria, también resaltó los cambios políticos en la región con el ascenso de nuevos líderes de izquierdas en varios países y mostró su "interés" y "simpatía" por un nuevo contexto internacional en el que, dijo, "hay una política de mayor autonomía y de mayor presencia de América Latina en la discusión mundial".

Considerado como un renovador de la prosa latinoamericana, este autor argentino "de la vieja escuela" del género policiaco, como él mismo se define, defendió los "grandes géneros populares" como el policial, del que subrayó su "clara relación entre política y crimen, entre corrupción, dinero y poder" como una crítica al sistema capitalista.

"Estos géneros que parecen marginales a la línea central han sido, en definitiva, los que los escritores actuales (latinoamericanos) reconocemos como un punto de referencia importante cuando estamos hablando de literatura y política", consideró.

A su juicio, la ciencia ficción o la novela policial "ha percibido ciertos elementos del sistema capitalista, de la sociedad, con muchos más lucidez que muchos escritores de izquierda políticos que trataban de criticar el estado del mundo".

Por otra parte, Piglia se mostró convencido de que "no sería interesante escribir si no tuviera un desafío", y destacó que la sensación que tiene cuando comienza un libro es que "empieza de nuevo".

"Escribir libros no es una cosa mecánica, que uno escribe un libro y después otro", opinó este autor, quien ahora trabaja en un nuevo proyecto de cuentos que ahondará en el significado de las historias personales y retomará anécdotas del diario personal que escribe desde su juventud.

Aunque su última obra, "Blanco nocturno", se ha alzado recientemente con importantes galardones como el Premio de la Crítica 2011 o el Premio Hammet de novela negra, el novelista y ensayista admitió su "incomodidad" con estos reconocimientos, al señalar que "es muy difícil decidir con total certidumbre que un libro es mejor que otro".

"Los premios son importantes, porque uno siente como un respaldo de lo que está haciendo, pero luego hay que volver a escribir y eso tiene una lógica que no debe ser perturbada por estos reconocimientos públicos", aclaró.

Casi medio siglo después de que se publicara su primer libro de relatos "Jaulario", Piglia reconoció que le hubiera gustado "escribir mejor", pero confesó que se siente "satisfecho" por haber encontrado lectores interesados en sus historias.

"Sentir que lo que uno va escribiendo está generando interés es siempre un elemento que es muy importante para un escritor", añadió.