La multiplicación de voces no suple al periodismo: De Moragas

GUADALAJARA, JALISCO (01/JUL/2013).- La multiplicación de voces ciudadanas gracias a las nuevas tecnologías no sustituye la necesidad de un periodismo en el sentido de trabajo profesional, independiente, riguroso, documentado, contrastado, interpretativo de la realidad social, anota el investigador y catedrático catalán Miquel de Moragas i Spà.

Estudioso de la comunicación contemporánea, autor de libros como Sociología de la Comunicación de Masas e Interpretar la Comunicación, apunta que las políticas culturales y de comunicación deben priorizar la producción de contenidos de interés social, que a su vez se requiere que sean accesibles a través de las nuevas redes y plataformas.

Cuando no se articulan comunicación y cultura también se pierde la oportunidad de democratizar la cultura y la educación, advierte el fundador de proyectos como el Instituto de la Comunicación y el Centro de Estudios Olímpicos.

Doctor en Filosofía y académico de la Universidad Autónoma de Barcelona, Miquel de Moragas estuvo en Guadalajara para impartir un seminario organizado por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO). El miércoles pasado el Departamento de Estudios Socioculturales de la universidad le dio un reconocimiento por sus 40 años de trayectoria académica.

En sus disertaciones ante un grupo de académicos locales, el fundador del sitio web Portal de la Comunicación, del que forma parte del comité técnico, hizo referencia a que la mercantilización del espacio público es uno de los temas a debate.

Antes de partir de regreso a Barcelona, Miquel de Moragas respondió el viernes a una batería de preguntas enviadas a su correo electrónico:

—Usted plantea que uno de los nuevos paradigmas es que el poder de la comunicación actualmente se desplaza de la capacidad de difundir contenidos a la capacidad de producir contenidos. ¿Podría ampliar esta perspectiva?

—Los cambios tecnológicos han ampliado enormemente los canales de difusión, también las plataformas de recepción; el principal problema ahora es el de los contenidos, especialmente el de los contenidos de calidad de interés social. Pienso que las políticas culturales y de comunicación deben priorizar la producción de esta clase de contenidos que deben ser accesibles a través de las nuevas redes y plataformas.

—¿Cuál es el nuevo rol que han asumido los receptores que ahora también son emisores? ¿Cuál es el impacto de esto en los medios informativos tradicionales?

—La capacidad de difundir información ha dejado de ser una exclusiva de las corporaciones mediáticas, los emisores ciudadanos se han multiplicado, pero al mismo también se constata una continua intersección (o complementariedad) entre ambos. Podemos llamar a esto una nueva ecología de
la comunicación.

—Los medios informativos tradicionales están en crisis no sólo económica. ¿Qué posibles escenarios les vislumbra en el corto y largo plazo, de acuerdo con sus investigaciones?

—Desde mi experiencia en Barcelona veo dos crisis de naturaleza distinta, una negativa y otra que puede ser positiva. La crisis negativa es la económica, el empobrecimiento de los recursos, la pérdida de ingresos publicitarios, los despidos y la concentración de empresas periodísticas; todo ello repercute en pérdida de calidad informativa y reducción del pluralismo. Pero hay otra crisis que puede ser positiva, la crisis del cambio tecnológico, nuevos medios, más comunicación en línea, que abre nuevas expectativas a la información. El problema es que estos cambios no han podido equilibrar, de momento, las pérdidas de ingresos de los medios convencionales, tanto de la publicidad como de la venta de periódicos.

—Ha reflexionado en torno a que los medios informativos tradicionales ya no son el cuarto poder. ¿Qué son ahora? ¿Qué les demanda las nuevas realidades a los periodistas?

—Debemos seguir diciendo que sin periodismo no hay democracia. La multiplicación de voces ciudadanas no sustituye la necesidad de periodismo en el sentido de trabajo profesional, independiente, riguroso, documentado, contrastado, interpretativo de la realidad social.

—Usted se ha preguntado ¿dónde está la frontera entre los medios y los no medios?, y ha mencionado que “ya no hay medios y no medios”. ¿A qué se refiere?

—Me refiero a que con las actuales tecnologías de la comunicación todas las instituciones sociales pueden ser medios de comunicación, en el sentido de que pueden difundir directamente la información que ellas mismas producen o reciben; por ejemplo, las universidades, los organismos no gubernamentales, las entidades deportivas, etcétera. Esto configura, como le decía, una nueva ecología de la comunicación.

—También ha señalado que uno de los debates actuales es sobre la comercialización y el deterioro del espacio público, concebido éste no solamente como el urbano sino también el mediático y el educativo, entre otros. ¿Cuál es su visión al respecto? ¿Qué consecuencias tiene esto para el ciudadano común?

—Entiendo que el espacio público es el ámbito que debe garantizar la participación y la  igualdad en la política, en la economía, en la educación y en la cultura. El mercado no puede ser el único referente de nuestras vidas

—Usted ha explicado que las políticas culturales y las políticas de comunicación deben articularse, que son inseparables. ¿En qué sentido sería esto? ¿Qué sucede cuando no se articulan?

—Las relaciones entre comunicación y cultura son múltiples. No sólo porque la comunicación es el vehículo de la difusión cultural, sino también porque la producción cultural es inseparable de la expresión, de los lenguajes. Pero estas relaciones se han ido incrementando con el desarrollo de los medios y de las industrias culturales, hoy especialmente influenciadas por la imagen. En relación con las políticas culturales puse el ejemplo del programa MEDIA de la Unión  Europea, un programa de apoyo a la producción  de cine y video, al mismo tiempo cultura y comunicación. Otro ejemplo a destacar es el de la política cultural de la UNESCO que hoy centra su atención en la diversidad de las expresiones culturales, un tema indisociable de la comunicación. Cuando no se articulan comunicación y cultura también se pierde la oportunidad de democratizar la cultura y la educación.  

—¿A qué aspira un investigador de la comunicación con sus trabajos? ¿Cuáles serían sus objetivos más allá de generar conocimientos?

—Interpreto el compromiso social de un investigador de la comunicación en dos principales direcciones. Por una parte contribuir  al análisis crítico de los medios, observar sus contenidos y funciones, los medios son observadores de la sociedad, pero ellos también deben ser observados. Por otra parte la investigación debe ser propositiva, aportar conocimientos para la implementación de políticas democráticas de comunicación. A todo ello aún añadiría un compromiso bien actual: hacer un análisis prospectivo, sobre las tendencias de la comunicación, en la presente etapa de cambios acelerados por la globalización y la digitalización. Esta tarea no puede plantearse de manera individual, de ahí la importancia que debe atribuirse a la cooperación, también en el terreno académico de la comunicación.

PERFIL
Autor referente en el estudio de la comunicación

Miquel de Moragas Spà (1943) es uno de los académicos más destacados en los estudios de la comunicación y la cultura de masas a escala internacional, además de una de las voces autorizadas y prestigiosas cuando se trata de abordar este fenómeno.

Sus teorías son casi obligadas para los estudiantes de la carrera de ciencias de la comunicación, sobre todo cando se trata de la investigación de la comunicación de masas. Es doctor en filosofía, catedrático de la Universidad Autónoma de Barcelona y ha sido director del Instituto de la Comunicación de la UAB. También presidió la comisión gestora de la Asociación Española de Investigación de la Comunicación.

Forma parte del Comité Académico del Portal de la Comunicación.Com-UAB (www.portalcomunicacion.com).

Su tesis doctoral se enfocó en semiótica y comunicación de masas. Entonces publicó diversos libros sobre teoría y sociología de la comunicación.

Más recientemente se ha especializado en cuestiones relativas al deporte, la comunicación  y las políticas culturales. Entre las más recientes publicaciones de De Moragas se encuentra Interpretar la comunicación. Estudios sobre medios en América y Europa de 2011.

FRASE

"El mercado no puede ser el único referente de nuestras vidas "

Miquel de Moragas, investigador.