El INAH atiende afectaciones a edificio histórico de Chihuahua

CHIHUAHUA, CHIHUAHUA (31/MAR/2016).- El Instituto Nacional de antropología e Historia inició los trabajos de diagnóstico de la problemáticas de humedad que afectan actualmente a la catedral de la ciudad de Chihuahua.
 
En rueda de prensa, el delegado del INAH en el estado, Jorge Carrera, precisó que un equipo formado por especialistas en métodos geofísicos de prospección de la institución inició los trabajos.
 
Acompañado por el arquitecto Gastón Fourzan, de la Asociación Civil Protego, explicaron la manera en que se llevará a cabo este estudio.
 
Indicaron que José Ortega Ramírez y Luis Ángel Villa Alvarado, provenientes del Laboratorio de Geofísica de la Coordinación Nacional de Arqueología del INAH iniciaron ya una serie de procedimientos científicos.
 
Estos primeros trabajos permitirán detectar el agua y las sales del subsuelo para luego, con los resultados, iniciar acciones tendientes a contrarrestar la humedad en los muros del edificio histórico más importante de la ciudad.
 
El Laboratorio de Geofísica del INAH es parte de la Subdirección de Laboratorios y Apoyo Académico que concentra laboratorios especializados en estudios fundamentales para la investigación del patrimonio histórico, arqueológico y paleontológico.
 
Actualmente, esta unidad cuenta con el equipo de prospección geofísica más avanzado a nivel nacional.
 
Precisaron que los trabajos de estudios, que los expertos realizarán son tomografía, por medio del uso del geo radar y resistividad eléctrica, a través de la interpretación de ondas en el subsuelo obtenidas con el uso de electrodos.
 
Con el geo radar se utilizan antenas con diferentes frecuencias de vibración que producen ondas electromagnéticas, por medio de las cuales se hace un sondeo de ocho a 10 metros en el subsuelo.
 
En el caso de la resistividad eléctrica, se colocarán una serie de líneas que contienen electrodos en los cuatro costados del inmueble.
 
Estos receptores generan reflexiones de ondas que los especialistas interpretan con respecto de los materiales del suelo (agua, sales y la porosidad de las rocas).
 
Ambos métodos están regulados por las normas que rigen este tipo de prospecciones, ya que al trabajar con patrimonio arqueológico, y en este caso, monumentos históricos, se buscan alternativas lo menos invasivas posibles para evitar cualquier daño.
 
El equipo del Laboratorio de Geofísica del INAH ha trabajado en proyectos similares, como la restauración de los murales de Diego Rivera en la Universidad Autónoma de Chapingo, el Museo Regional Michoacano y el Museo de Artes Populares de Pátzcuaro.
 
El proceso consta de varias etapas, la primera es la obtención de datos a través de los métodos geofísicos, posteriormente se procesa y se "limpia" la información, y a través de procesos matemáticos se hace la interpretación de la información obtenida, para elaborar el informe final.
 
Según explicó la arquitecta Wendy Suárez Tena de la Sección de Monumentos Históricos del INAH Chihuahua, la aparición de humedad en el edificio se ha manifestado en la degradación de los morteros y los enjarres, así como en las manchas visibles en los muros.
 
A través de estos estudios se podrá ubicar la raíz de donde se genera la infiltración de agua para buscar alternativas que eviten este fenómeno y lograr la restauración integral del inmueble.
 
Este estudio de diagnóstico surgió como una iniciativa de la mesa de trabajo pro conservación de la Catedral Metropolitana de Chihuahua.
 
Esta mesa está integrada por representantes de la Arquidiócesis de Chihuahua, el párroco de la Catedral, Protego A.C. y el Centro INAH Chihuahua.