Científicos de la NASA, a través del Telescopio Espacial James Webb (JWST) han descubierto huellas químicas de gases al analizar la atmósfera del exoplaneta K2-18b, lo que según expertos ha registrado las señales más fuertes hasta la fecha de posible vida fuera del sistema solar.Según el portal de la NASA, K2-18 b es un exoplaneta supertierra que orbita una estrella de tipo M, también conocida como enana roja, que son las estrellas más pequeñas y frías que existen. Tiene una masa de 8,92 veces el tamaño de la Tierra, tarda 32,9 días en completar una órbita alrededor de su estrella y se encuentra a 0,1429 UA de ella. Su descubrimiento se anunció en 2015.En 2023, la NASA publicó que el Telescopio Espacial James Webb reveló la presencia de moléculas en el exoplaneta que contienen carbono, como metano y dióxido de carbono. El descubrimiento de Webb se sumó a estudios que sugirieron que K2-18 b podría ser un exoplaneta Hycean, con el potencial de poseer una atmósfera rica en hidrógeno y una superficie cubierta por un océano de agua.Ahora, según el estudio publicado en The Astrophysical Journal Letters, “la reciente espectroscopía de transmisión del JWST del candidato a mundo hiceano K2-18 b en el infrarrojo cercano condujo a las primeras detecciones de las moléculas carbonadas CH₄ y CO₂ en su atmósfera (…) Las observaciones también proporcionaron un indicio tentativo de sulfuro de dimetilo (DMS), un posible gas de biofirma”.Es decir, el estudio ha enfatizado que no precisamente está anticipándose a anunciar el descubrimiento de organismos vivos reales, sino de una posible biofirma. En otro planeta, una biofirma es una característica, elemento, molécula o sustancia que proporciona evidencia de vida pasada o presente. “La inferencia tentativa de los gases (sulfuro de dimetilo, o DMS y disulfuro de dimetilo, o DMDS) en K2-18 b abre un importante debate sobre la posible presencia de vida en K2-18 b”, explicaron los autores del estudio. Las investigaciones sugieren que los gases pudieron haber sido generados en el exoplaneta por vida microbiana. Por lo que anunciaron que realizarán más observaciones.“Para establecer de manera sólida tanto la veracidad de los hallazgos actuales como su posible asociación con la vida en K2-18 b aún se necesita un esfuerzo comunitario dedicado en múltiples direcciones: observacional, teórica y experimental“, finalizó el estudio.* * * Mantente al día con las noticias, únete a nuestro canal de WhatsApp * * *EA
