El Senado de México reaccionó 35 días después de los primeros bombardeos e invasión militar de Rusia para solidarizarse con el pueblo y gobierno ucraniano.Durante la sesión ordinaria y a propuesta del presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, Héctor Vasconcelos, se leyó el pronunciamiento, aunque omitiendo cualquier condena o mención a Rusia o a su presidente Vladimir Putin.En tribuna, la senadora del Partido del Trabajo, Cora Cecilia Pinedo Alonso, secretaria de la Mesa Directiva, leyó el pronunciamiento en el que el Senado manifestó su preocupación por las graves violaciones cometidas en contra de la población civil y expresó su solidaridad con Kiev."Manifestamos nuestra condena al hecho de que esta invasión haya causado y siga causando muertes en la población civil y el desplazamiento de millones de personas y ante el riesgo de la pérdida de su vida y la destrucción indiscriminada de su infraestructura, buscan refugio en naciones vecinas".Asimismo, la Cámara Alta se pronunció por un cese inmediato de las hostilidades, la protección de los civiles y el respeto al derecho internacional humanitario.Manifestó su rechazo al uso de armas explosivas, químicas o nucleares en las zonas pobladas y en contra de los ataques militares contra civiles y bienes de carácter civil como residencias, escuelas y hospitales que son intolerables.Además, se indica en el pronunciamiento que esta situación "nos lleva a una realidad inaceptable, hoy en esa región del mundo se ha provocado el mayor éxodo de refugiados desde la Segunda Guerra Mundial"."Lamentamos que la población civil ucraniana, particularmente, los grupos en situación de vulnerabilidad, como personas mayores, con discapacidad, mujeres y niños no tengan acceso a agua, alimentos, electricidad y medicinas, ni a la infraestructura básica y servicios de salud", añade el documento elaborado por Vasconcelos, senador por Morena.Los senadores mexicanos expusieron que es urgente garantizar el respeto de los bienes indispensables para la supervivencia de la población y de la infraestructura imprescindible para la entrega de ayuda humanitaria.JM
