La reducción de la jornada laboral a 40 horas es un tema polémico que enfrenta al sector empresarial y al de los trabajadores. El gobierno de la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo se ha decantado por la gradualidad en su aplicación. Y en este contexto, se prepara su discusión en el Congreso de la Unión. Pero ¿Qué opinan los expertos?Antonio Ávalos, académico de la Universidad Panamericana, considera viable que la reforma para reducir la jornada laboral de 48 a 40 horas comience a aplicarse a partir de 2026 y quede completamente implementada entre dos y tres años después. El académico coincidió en que la reforma debe aplicarse de forma gradual en el país, pero estima que en 2026 ya existirían condiciones para iniciar su implementación y contar con un periodo de adaptación razonable. “Creería que en dos años ya pudiéramos estar listos para que, ahora sí, en la totalidad del país esté implementada esta reforma. Yo creo que desde 2026 para terminar en 2028 o 2029; unos dos o tres años sería algo razonable”. Para lograrlo, Ávalos sugiere un enfoque por sectores, es decir, que industrias como manufactura, servicios y comercio comiencen de forma escalonada. También plantea establecer plazos diferenciados según el tamaño de la empresa: transnacionales, micro, pequeñas y medianas. Entre los riesgos, advirtió que las empresas deberán contratar más personal, destinar recursos a horas extras y contar con mejores sistemas de medición de productividad. También alertó sobre riesgos legales ante posibles incumplimientos. Asimismo, destacó que la reforma fortalecería los derechos colectivos, al brindar más tiempo de descanso y convivencia familiar a los trabajadores. El Consejo de Cámaras Industriales de Jalisco (CCIJ) solicitó que la propuesta de reducción de la jornada laboral se aplique de manera gradual y diferenciada, de acuerdo con el tipo de empresa, el sector productivo y las condiciones regionales. Antonio Lancaster Jones, coordinador del CCIJ, advirtió que aplicar de forma inmediata la reforma tendría un fuerte impacto en la productividad y especialmente en las micro y pequeñas empresas, que ya enfrentan dificultades para cubrir sus plantillas laborales. “Lo que pedimos es que se dé de manera progresiva, que aplique de aquí hasta el 2030; es decir, que se reduzca la jornada dos horas cada dos o tres años”, explicó el dirigente. La propuesta busca que la reducción del horario de trabajo no sea uniforme, sino que contemple las diferencias entre los sectores industrial, comercial y de servicios, que enfrentan dinámicas y necesidades distintas. Desde la semana pasada se llevan a cabo mesas de trabajo entre el Gobierno, cámaras empresariales y sindicatos para llegar a un acuerdo sobre cómo implementar esta reforma. * * * Mantente al día con las noticias, únete a nuestro canal de WhatsApp * * *OA