Estados Unidos enfrenta un preocupante resurgimiento del sarampión, con más de 800 casos registrados en lo que va de 2025, más del doble de los reportados en todo 2024. Tennessee se ha unido a otros nueve estados con brotes activos (definidos como tres o más casos), según informaron los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).Hasta el jueves, el Departamento de Salud de Tennessee confirmó seis casos de sarampión, todos en la región central del estado. Al menos tres de los contagios están relacionados entre sí, aunque no se han revelado más detalles sobre los vínculos o el origen del brote. El primer caso se anunció el 21 de marzo, seguido de tres más el 1 de abril y dos adicionales el 17 de abril. Aunque los comunicados oficiales no han declarado formalmente un brote, Tennessee aparece en la lista de estados con brotes activos en el informe más reciente del CDC.Texas encabeza la lista con 624 casos, la mayoría concentrados en el oeste del estado. Dos niños no vacunados han muerto a causa del virus, y 64 personas han sido hospitalizadas. El condado Gaines, con una población de poco menos de 23 mil personas, ha reportado 386 casos, principalmente dentro de una comunidad menonita con bajas tasas de vacunación.Además de Tennessee y Texas, los estados con brotes confirmados incluyen Indiana, Kansas, Michigan, Montana, Oklahoma, Ohio, Pensilvania y Nuevo México. En Nuevo México, se ha registrado una muerte en un adulto no vacunado y 65 casos vinculados genéticamente al brote texano. Michigan y Kansas también tienen brotes relacionados con casos en Canadá y Texas, respectivamente.El brote no se limita a Estados Unidos. En Ontario, Canadá, 925 personas han enfermado desde octubre de 2024. En Chihuahua, México, se han reportado 514 casos, muchos de ellos vinculados al brote en Texas, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).El sarampión es un virus altamente contagioso que se transmite por el aire y puede sobrevivir durante horas en espacios cerrados. Aunque se consideraba eliminado de Estados Unidos desde el año 2000, el virus ha vuelto a circular, en gran parte debido a la disminución de las tasas de vacunación infantil tras la pandemia y al aumento de exenciones religiosas o personales.Los síntomas iniciales incluyen fiebre, secreción nasal, tos y ojos rojos, seguidos de un sarpullido característico que comienza en la cara y se extiende por el cuerpo. Las complicaciones pueden ser graves: neumonía, ceguera, inflamación cerebral e incluso la muerte.La vacuna triple viral (SRP), que protege contra el sarampión, las paperas y la rubéola, sigue siendo la herramienta más eficaz para prevenir la propagación. Se recomienda la primera dosis entre los 12 y 15 meses de edad y la segunda entre los 4 y 6 años. En comunidades con una cobertura superior al 95%, el virus tiene menos posibilidades de circular, gracias a la inmunidad de grupo.Mientras los funcionarios de salud trabajan para contener los brotes y fomentar la vacunación, los expertos advierten que el sarampión podría persistir en el país durante todo el año si no se revierte la tendencia de rechazo a las vacunas.Con información de AP.KG