El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, anunció este jueves que su gobierno estudia enviar una nota diplomática a Estados Unidos para expresar su “disconformidad” por la emisión de visados con género masculino a dos diputadas trans brasileñas. La situación, que ha generado indignación en el país, fue calificada por el mandatario como una injerencia indebida en la soberanía brasileña y una falta de respeto a la identidad de género reconocida oficialmente por el Estado.“Eso hablé con el ministro de Relaciones Exteriores hoy, que tiene que haber una nota mostrando la disconformidad de Brasil con la injerencia de una embajada en el pasaporte de una brasileña”, expresó Lula durante un acto de firma de decretos en defensa de los derechos de las mujeres.Las diputadas Erika Hilton, del Partido Socialismo y Libertad (PSOL), y Duda Salabert, del Partido Democrático Laborista (PDT), denunciaron recientemente haber recibido visados estadounidenses en los que figuraban con género masculino, a pesar de que en sus documentos oficiales brasileños son identificadas como mujeres. Hilton había sido invitada a participar en un evento organizado por la comunidad brasileña en Estados Unidos junto a las universidades de Harvard y el MIT, pero decidió no asistir tras recibir el documento con la clasificación errónea.“Ellas no fueron a pedir un cambio de sexo, fueron a pedir un visado, y eso es lo que deberían haberles dado”, subrayó Lula. El presidente también criticó el enfoque adoptado por las autoridades estadounidenses y afirmó que “quién tiene derecho de discutir lo que es esa mujer es Brasil y ella, sobre todo, no un decreto del presidente estadounidense, Donald Trump”.Además del pronunciamiento del Ejecutivo, Lula instó a que el Congreso brasileño eleve su protesta a las cámaras legislativas estadounidenses. “Tiene que haber una protesta de la Cámara de Diputados de Brasil a la Cámara de Diputados de Estados Unidos. Tiene que haber una carta al Senado estadounidense”, sentenció.La cancillería brasileña, por su parte, ya ha entablado conversaciones con las parlamentarias afectadas, según confirmó el propio Lula. El caso ha encendido el debate sobre el respeto a la identidad de género en el ámbito diplomático y ha tensado momentáneamente las relaciones entre ambos países.KG
