Este martes, diputados rusos aprobaron un controvertido proyecto de ley que parece hecho a la medida para favorecer al actual mandatario Vladimir Putin, y es que la legislación se encamina a garantizar la inmunidad judicial vitalicia a los expresidentes.Según el texto, aprobado en primera lectura y cuya adopción definitiva no deja lugar a dudas, una persona que haya sido presidente "no puede ser objeto de una causa criminal o administrativa, ni tampoco ser detenido, registrado o interrogado".Esta inmunidad, que también se acordará a la familia de todos los expresidentes rusos, ampara de igual manera a su patrimonio inmobiliario, sus medios de transporte y comunicación, así como a todos los documentos que le pertenezcan.No obstante, hay excepciones: un exmandatario sólo podría perder su inmunidad si es acusado de traición o de otro crimen grave, y si estas acusaciones cuentan con el apoyo del Tribunal Supremo, el Tribunal Constitucional y dos tercios de los diputados de la Duma, la cámara baja del Parlamento, y del mismo número de senadores.Este proyecto de ley hizo que aumentaran los rumores sobre una salida del poder de Putin, de 68 años; sin embargo, el Kremlin los desmintió e incluso aseguró que el presidente goza de buena salud.Por ahora, sólo hay un expresidente de Rusia: Dmitri Medvedev, que dirigió el país entre 2008 y 2012, cuando, debido al limite del número de mandatos consecutivos, Putin tuvo que dejar la jefatura del Estado y pasó a ser primer ministro.Tras el retorno de Putin al Kremlin, en mayo de 2012, Medvedev se convirtió en su primer ministro y en dirigente de Rusia Unida. Presentó su dimisión en enero de 2020 y fue nombrado vicepresidente del Consejo ruso de seguridad, dirigido por Putin.JM