Con muchas décadas de retraso, pero hoy parece que al fin están coincidiendo voluntades políticas desde el poder, desde organismos autónomos y desde organizaciones de la sociedad civil para intervenir y rescatar a un Poder Judicial del que desconfían por sus altos niveles de corrupción, 8 de cada 10 ciudadanos, de acuerdo con la última encuesta del Observatorio Ciudadano Jalisco Cómo Vamos.De hecho este dato lo recordaron ayer en un comunicado el propio presidente y el director de este Observatorio, Juan Arturo Covarrubias y Augusto Chacón, al pronunciarse por lograr un Poder Judicial confiable e imparcial y respaldar la decisión del presidente del Supremo Tribunal de Justicia y del Consejo de la Judicatura de Jalisco, Ricardo Suro, de eliminar la “lista de reserva de jueces” que es el más claro ejemplo de la opacidad, el influyentismo y el uso faccioso de la justicia que ha regido siempre en la operación de este Poder.Este pronunciamiento, en el que plantean también la urgente necesidad de hacer una profunda reforma del Poder Judicial de cara a la ciudadanía, cierra una semana en la que además de quedar descartada la errática iniciativa del diputado naranja Salvador Caro, de que fuera el gobernador en turno quien eligiera a los magistrados, tuvo otros dos momentos claves que deben abrir de una vez por todas puertas y ventanas de un Poder secuestrado por las mafias y las tramas de corrupción.1)El encargo presidencial que le dieron al gobernador Enrique Alfaro de coordinar la mesa de trabajo de los gobernadores para sistematizar y denunciar las irregularidades de juzgadores de todos los Tribunales del país que sería un buen paso para empezar a escrutar al Poder Judicial, sin duda, el menos vigilado de los tres poderes del Estado. Esta tarea le cayó al mandatario estatal luego de que el lunes denunció presuntas irregularidades de un juez por la liberación de un peligroso delincuente al que el Ejército y policías municipales de Lagos de Moreno habían detenido una semana luego de enfrentarlos a balazos. El reclamo abierto lo hizo Alfaro y el fiscal Gerardo Octavio Solís, por el hecho de que un día después de su liberación mataron a un policía municipal que había participado en su detención.2)La petición que acordó el martes pasado el Comité de Participación Social del Sistema Estatal Anticorrupción para que el Consejo de la Judicatura investigue el proceder del juez Cuarto de lo Civil, Manuel Edgardo Servín Orozco, y los magistrados del Supremo Tribunal de Justicia de Jalisco, Luis Enrique Villanueva, José de Jesús Covarrubias y Héctor Delfino León, por atentar contra la Libertad de Prensa al fallar a favor del ex diputado Enrique Aubry en la denuncia que hizo por presunto daño moral en contra del periodista Pedro Mellado Rodríguez, injusticia que fue corregida por la justicia federal.Estas irrupciones, que seguramente encontrarán muchas resistencias dentro y fuera de los juzgados, bien pueden ser el inicio del rescate colectivo que debemos hacer del Poder Judicial, indispensable para poder pacificar Jalisco.jbarrera4r@gmail.com
