Hoy es un día para reconocer a las mujeres. A todas aquellas que han tenido la oportunidad de ser madres, pero sobre todo a aquellas que han desafiado toda agenda y todo límite en el desempeño de ser madre trabajadora y ser capaz de ser una malabarista en un circo de tres pistas. Sí, todas las mujeres madres experimentan un desdoblamiento de personalidad para el que no están preparadas, o la mayoría no lo está del todo antes de verse en la necesidad de equilibrar su vida entre el ser mujer, profesionista y madre. Sin duda cambia la gráfica de prioridades cuando llegan los hijos, no porque el concepto “sacrificio” aparezca, no me gusta siquiera pensar en ello, ser madre no significa perder o recibir un castigo, significa transformarse, y es a partir de ahí que reconocemos un desafío de verdad. Quien piense que no es desafiante, intente mantenerse al día en los grupos de padres de familia o transporte escolar y actividades extracurriculares cuando se tiene más de dos hijos sin morir en el intento.De los 66 millones de mujeres que habitan en el país, 38 millones son madres. El 78% tienen un empleo remunerado, el 18% trabaja por cuenta propia, el 2% trabajan sin un pago y sólo el 2% son empleadoras y son sus propias jefas. Ser madre es un proyecto personal independientemente de cuál sea tu profesión u oficio, en el momento en que una mujer se activa en “modo mamá” la perspectiva se transforma.En México hay cuatro millones de mujeres trabajadoras que deben lidiar con ese proyecto personal solas, son madres solteras que resuelven el día a día de sus hijos. Afortunadamente el padrón de Deudores Alimentarios que este año se aprobó les brinda una posibilidad de recibir apoyo o al menos restringir los derechos de los padres irresponsables; aunque muchas de las veces su responsabilidad se estipule sólo en el 15% de su ingreso mensual por cada hijo. Considerando que aproximadamente el 40% de los ingresos de las madres trabajadoras se destina a alimentos, sin considerar el resto de los rubros como vivienda, escuela o transporte, ese mínimo obligatorio para los deudores alimentarios es casi una broma, teniendo como referencia que el 67% de las madres con empleo remunerado en el país ganan dos salarios mínimos mensuales, lo que se traduce en aproximadamente 10 mil pesos por familia. ¿De verdad alcanzan 10 mil pesos para brindar calidad de vida? Hay madres que lo hacen posible, es ahí cuando reconozco -escéptica como soy- que la magia existe. Porque existe, de lo contrario cómo se explica que haya mujeres que cumplan con una jornada laboral, organicen “tandas”, lleven con precisión milimétrica las cuentas de sus ventas por catálogo, tengan tiempo de tomar clases de zumba y organizar el día a día de sus hijos. Sí, hay mujeres así en esta vida, todos conocemos alguna.Hoy es un día para agradecer, no sé si para celebrar, muchas mujeres no podrán o no querrán hacerlo por la ausencia, la pérdida o la búsqueda. Hay a quienes la distancia les juega en contra, pero quienes tengamos la fortuna de tener a esas madres-hermanas-amigas-vecinas-compañeras de trabajo que están a nuestro alrededor y se preocupan por nosotros sepan el valor que tienen y agradezcamos que forman parte de nuestras vidas.puntociego@mail.com