Excepto la renuncia de la regidora María Gómez Rueda al partido Movimiento Ciudadano y un día antes la cancelación de su registro a la precandidatura a la alcaldía de Zapopan por no poder “participar en ningún instituto político en donde la agenda de género sea una simple simulación”, finalmente Pablo Lemus Navarro impuso sin mayores rompimientos (hasta ahora) sus condiciones en el reparto de las precandidaturas naranjas en juego en este municipio que llegó a gobernar en el 2015 y en el que inauguró la posibilidad de reelegirse en las elecciones del 2018.La buena evaluación y creciente popularidad que mantuvo en su primer trienio y en lo que va del segundo fueron un factor decisivo para que finalmente su jefe de gabinete en ambos periodos, Juan José Frangie, lograra la precandidatura de unidad a la alcaldía de Zapopan, que buscaron afanosamente otros fuertes cuadros de MC del Congreso local y federal, y ex dirigentes empresariales ligados al alfarismo, que tuvieron que conformarse con candidaturas para posiciones legislativas.Tal vez por haber sido uno de sus antecesores en la dirigencia de la Coparmex Jalisco, Lemus se inclinó finalmente por Frangie antes de que por José Luis Tostado, otro de sus más cercanos colaboradores, quien sin embargo renunció esta semana a la secretaría general del Ayuntamiento de la ex villa maicera, y ayer fue anunciado como titular de la Consejería Jurídica del Gobierno del Estado que dejó a partir de este año Adrián Talamantes luego de que fue nombrado magistrado del Supremo Tribunal de Justicia.Lemus supo hacer valer en el sanedrín alfarista el valor de su marca en Zapopan, que empezó a desarrollar desde el primer día que llegó a la alcaldía de Zapopan en el 2015, tras una campaña electoral que ligó a Enrique Alfaro en su propaganda, para capitalizar el enorme arrastre de quien competía para la alcaldía de Guadalajara.En los últimos meses los jaloneos fueron intensos al interior del partido naranja, donde inquietaba el protagonismo del alcalde zapopano, más aún cuando dejaba abierta la posibilidad de buscar la candidatura de Guadalajara, compitiéndole a Ismael del Toro su reelección.Esta carta la jugó hasta el final. Todavía el viernes pasado recibió en su oficina de la Presidencia Municipal a José Narro, delegado de Morena en Jalisco, y a Hugo Rodríguez, quien litiga en tribunales su posición de dirigente local de ese partido, a quienes habría aceptado la eventual posibilidad de ser el candidato del partido de AMLO a la alcaldía tapatía.Este último intento de fichaje de los morenistas habría sido también un factor determinante para fortalecer a Lemus en la negociación final para ungir a Frangie como candidato de unidad. Lo que habrá que ver ahora es hasta qué grado se cierran la heridas, se reconstituyen las confianzas y el alfarismo arropa la campaña de Frangie, cuya candidatura debe oficializar MC el próximo mes.
