En México vivimos el final de un sexenio en el que los spots televisivos y radiofónicos que se transmiten a diario desde hace varias semanas nos dejan ver un país en pleno desarrollo, grande, líder en varias de las materias que dan sustento a una nación, como lo son: la agroindustria alimentaria, telecomunicaciones, industria automotriz, fuentes de empleo creadas, Turismo, inversiones establecidas y otras acciones alcanzadas en el sexenio de Enrique Peña Nieto (las reformas estructurales requieren de al menos dos décadas para ser técnicamente evaluadas y calificadas), no obstante, según las encuestas dadas a conocer por los medios de comunicación masiva y el desencanto de la sociedad, es el Presidente de nuestro país peor calificado en la historia.En materia de liderazgos -y sus pifias-, me llama la atención el paralelismo existente con lo que suele suceder en otros campos del desempeño social, ejemplos de ello son: La molestia, rechazo y el dramático final presenciado luego de que el fin de semana el mánager de los Dodgers sacó del juego a Rich Hill, pitcher, que tenía totalmente dominados a los bateadores de los Medias Rojas de Boston a los que ganaban cuatro carreras a cero, faltando acaso tres entradas del cuarto juego de la Serie Mundial. Lo que vino después fue un “rosario de pitcheres” que no pudieron contener a sus oponentes, los que terminaron propinándoles una verdadera paliza.Con la pifia del líder y el desencanto de sus propios jugadores, dejaron sobre el terreno la cercana oportunidad de volver a ser campeones en la Serie Mundial de beisbol, para infortunio de sus múltiples seguidores.Otra pifia que viene a colación, es el aún reciente despido de Matías Almeyda del timón de las Chivas de Guadalajara, que en materia de futbol encabezan con mucho las preferencias de seguidores, y que pese a haber alcanzado cinco diferentes títulos en su corta estancia en nuestra ciudad, fue despedido con la venia del líder de la empresa, para frustración de sus millones de seguidores en todo el mundo.Afortunadamente, en estos últimos casos, y pese a todos los pesares y los millones de millones de dólares que están en juego en la importante industria del entretenimiento-, se trata “sólo de juegos”, de esos que muchos practican o simplemente disfrutamos por televisión. APUNTELos gobiernos de México y Jalisco como entidades administrativas tienen logros que “presumir”, de acuerdo con lo que han difundido, no obstante, la sociedad en el país y en la entidad les impusieron una verdadera paliza en las urnas en ambos casos, ¿será que somos injustos al calificarlos?El resultado final de los líderes es lo que cuenta, por lo que espero nos sirva de lección, con independencia de lo que el destino les aguarde, porque en política nadie muere…hasta que muere.
