El tercer informe de López Obrador con motivo del aniversario de su triunfo electoral fue simplemente otra mañanera, pero con diferente audiencia. En lugar de los reporteros tenía a personal de su gabinete e invitados especiales. El contenido de su mensaje fue el mismo de todas las mañanas en los últimos tres años.De la pandemia -después de 17 meses que se inició- dijo que en Abril se redujo considerablemente el número de contagiados y que “Hemos hecho todo (?) lo humanamente posible”.De la economía establece que “No hemos aumentado (?) en términos reales los precios de la gasolina, diesel, luz, el gas ha aumentado un poco por arriba de la inflación, pero ya vamos a corregir muy pronto”. ¿Cuándo?. Y destacó otra vez -saludando con sombrero ajeno- que las remesas procedentes de Estados Unidos establecieron un nuevo récord en el mes de mayo, recibiendo 4,500 millones de dólares. Los 19,178 millones de dólares que los paisanos han enviado a sus familias en lo que va del año -que significan más que los ingresos juntos de la inversión extranjera, turismo y petróleo- no son un acierto del gobierno, pero sí motivo para presumir como un logro de su administración. Debería causar pena que quienes salieron del país ante la falta de oportunidades y progreso, sean quienes generan el mayor ingreso de México y el gobierno.Cuando se refirió a la violencia, dijo que “hay gobernabilidad”, ignorando las tragedias sangrientas -solo por hablar de algunas- de Zacatecas, Reynosa, Guanajuato, Guerrero y Michoacán. Dijo -como disco de repetición- que los grupos delincuenciales “es una herencia” y que “no creo que se hayan creado nuevos grupos en estos dos años y medio”.Habló López Obrador de “elecciones sin violencia” -deliberadamente mostrando poca memoria-, cuando los hechos demuestran que alrededor de las campanas hubo 169 ataques y 143 tuvieron consecuencias fatales, de los cuales 28 eran candidatos a puestos de elección.La percepción que se tiene en diferentes sectores sobre las prioridades del país y los resultados que se tienen en muchos renglones, continúan siendo disímbola. Algunas encuestas -Consulta Mitofsky- revelaban ayer primero de julio que AMLO tiene un 57.5 por ciento de aceptación, por un 42.4 de rechazo, mientras que por otra parte repetidamente se habla en la sociedad de que el presidente está perdido en la realidad. ¿Usted, qué opina?.daniel.rodriguez@dbhub.net