El "niño interior", según la IA, es un concepto psicológico que se refiere a la parte de nuestra psique que conserva las experiencias, emociones, recuerdos y creencias de nuestra infancia. Es más bien una representación de cómo fuimos y cómo vivimos esa etapa de la vida.Guarda tanto los momentos felices y alegres como las experiencias dolorosas, los miedos, las inseguridades y las heridas emocionales que pudimos haber vivido.Este niño interior sigue vivo en nosotros y puede influir significativamente en cómo nos sentimos, pensamos y nos comportamos como adultos. Puede afectar nuestras relaciones, nuestras reacciones emocionales, nuestra autoestima y nuestros patrones de comportamiento.También representa nuestra esencia más pura, nuestra capacidad de asombro, nuestra creatividad, nuestra espontaneidad y nuestra alegría. Es la parte de nosotros que conecta con el juego, la curiosidad y la inocencia.Si durante la infancia vivimos situaciones difíciles, negligencia, abuso o traumas, nuestro niño interior puede resultar "herido". Estas heridas pueden manifestarse en la adultez como inseguridades, miedos irracionales, dificultades para establecer límites saludables o patrones de autosabotaje.Trabajar en sanar las heridas de nuestro niño interior es un proceso importante para el crecimiento personal y el bienestar emocional. Implica reconocer esas heridas, comprender cómo nos afectan en el presente y brindarle a esa parte de nosotros el cuidado, la comprensión y el amor que quizás no recibió en su momento.Sanar al niño interior es un proceso delicado y personal, pero muy valioso. Aquí te compartimos algunas recomendaciones que hace la IA para explorar este difícil pero bello camino.Reconoce su existencia: acepta que esa parte de ti existe y que sus experiencias son importantes.Recuerda tu infancia: dedica tiempo a recordar cómo era tu infancia, tanto los momentos felices como los difíciles. Puedes mirar fotos, hablar con familiares o visitar lugares de tu infancia.Identifica tus heridas: reflexiona sobre qué situaciones o experiencias te marcaron, qué necesidades no fueron cubiertas y qué emociones quedaron sin procesar.Presta atención a tus reacciones: observa qué situaciones o personas en tu vida adulta desencadenan reacciones emocionales intensas o "infantiles". Estas pueden ser pistas de heridas no sanadas.Sé tu propio padre/madre amoroso: háblale a tu niño interior con la misma compasión, paciencia y comprensión que le darías a un niño real.Ofrécele seguridad y protección: recuérdale que ahora estás a salvo y que puedes cuidarlo.Valida sus sentimientos: dile que sus emociones son válidas, incluso si en el pasado fueron ignoradas o minimizadas.Satisface sus necesidades: identifica qué necesitabas de niño (atención, afecto, límites, juego, etc.) y trata de proporcionártelo a ti mismo ahora.Visualizaciones: imagina a tu niño interior y ofrécele consuelo, amor y protección en un lugar seguro.Escribir cartas: escribe cartas a tu niño interior expresando tus sentimientos, validando sus experiencias y ofreciéndole apoyo. También puedes escribir desde la perspectiva de tu niño interior.Diálogo interno: habla contigo mismo con amabilidad y comprensión, como si estuvieras hablando con un niño asustado o herido.Actividades lúdicas: permítete jugar, ser creativo y disfrutar de actividades que te gustaban de niño. Esto puede reconectar con la alegría y la espontaneidad de tu niño interior.Expresión artística: utiliza el dibujo, la pintura, la música o cualquier otra forma de arte para expresar las emociones de tu niño interior.Contacto físico: abrazarte a ti mismo o buscar contacto físico seguro y reconfortante puede ser una forma de brindarle seguridad a tu niño interior.Mira tus fotos de niño: permítete sentir las emociones que surjan al verlas.Haz algo que te encantaba de niño: montar en bicicleta, dibujar, leer cuentos, etc.Date permiso para sentir: no reprimas la tristeza, el miedo o la rabia que puedan surgir al conectar con tu niño interior.Sé paciente contigo mismo: la sanación lleva tiempo y no es lineal. Habrá días mejores y días más difíciles.Terapia: un terapeuta puede guiarte en este proceso, ayudarte a identificar heridas profundas y proporcionarte herramientas y estrategias para sanarlas de manera segura y efectiva. * * * Mantente al día con las noticias, únete a nuestro canal de WhatsApp * * *FF