Paolo Zanon es un empresario originario de Barcelona con 23 años en tierras tapatías. Motivado por el amor a su pareja se estableció dentro del sector de hotelería y turismo luego abriría en sociedad: Giardino di Bacco, un restaurante de comida italiana con mezcla de sabores mexicanos como, por ejemplo, pasta con crema al vino blanco con camarones y chipotle que - asegura Paolo - tiene buena aceptación en el gusto de los paladares que diariamente visitan el sitio que se ubica en la colonia Prados Providencia.Asegura que “durante el confinamiento no dejamos de vender. Los pedidos de comida que teníamos eran entregados directamente por nosotros, de esta manera, llegarían a las manos del comensal sin complicaciones”. Una estrategia que agradecieron aquellos que, desde casa, trataban de que la comida les hiciera grata la permanencia “voluntaria” que debían acatar.Pese a que los días pintaban un panorama desolador donde Paolo veía que colegas “cerraban la cortina” de sus establecimientos por no existir condiciones para mantenerse en operación. Giardino di Bacco seguía con los mismos colaboradores: 15 para ser exactos. Los sueldos se repartían al mínimo para que llevaran algo a su hogar y se descansaba una semana. La semana que sí laboraban podían obtener más dinero de propinas que continuaban dando los clientes.Aunado a lo anterior, se sumó la consideración del casero que les redujo la renta por seis meses, de esta manera se logró salir adelante y ser parte de una reactivación que recientemente quitó aquellas restricciones de aforo en lugares cerrados. El catering es otro de los servicios que ofrece el restaurantero Paolo. Generalmente este servicio es a partir de 10 personas y se lleva a cabo en la casa o en el lugar de quien lo solicite. Las actividades han regresado y eso ha sido un factor clave que inspira para retomar proyectos que estuvieron detenidos.Agradece que el ahorro sea una constante en su vida, de lo contrario posiblemente no hubiese soportado los meses de mayor incertidumbre, así que junto con su socio echaron mano de ese recurso. Paolo aconseja a que se vuelva un hábito guardar dinero para el mañana que todos desconocemos, contar con un capital que, ofrezca solidez a los gastos fijos que y un alivio momentáneo para seguir reinvirtiendo.Al cliente lo que pidaEs una realidad para Paolo comprender que todavía llegan clientes con temor al contagio, pese a que el restaurante cumple con los protocolos de salud. Algunos comensales llevan sus propios productos para desinfectar sin que esto cause descontento, al contrario, el empresario sabe que la confianza del consumidor se recobrará poco a poco.Renovar constantemente cualquier negocio o empresa, así como la perseverancia, son parte del éxito que aprendieron estos dos años. Además - agrega Paolo - tener amistades que animen y fortalezcan cuando pareciera que se agota la esperanza, amigos que estén presentes para devolver el entusiasmo que se había ido lejos.SABORES QUE CAUTIVAN Siempre al denteGiardino di Bacco es un restaurante de comida italiana con influencia de sabores mexicanos. Están ubicados en José María Vigil 2997 colonia Prados Providencia. Constantemente publican en sus redes sociales -Facebook e Instagram- la variedad de platillos que ofrecen. El catering es otra de los opciones del restaurantero Paolo, generalmente es a partir de 10 personas y se lleva a cabo en la casa o en el lugar de quien lo solicite."Durante el confinamiento no dejamos de vender. Los pedidos de comida que teníamos eran entregados directamente por nosotros, de esta manera, llegarían a las manos del comensal sin complicaciones".- Paolo Zanon, propietario del restaurante Giardino di BaccoMQ
