La conversación entre Richard Gere y Alicia Bárcena en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara inició con una reflexión que marcó el tono del diálogo: “Creo que podemos ver la mayoría de las cosas que experimentamos de una forma u otra. Podemos ser muy pesimistas y ver esto como el fin del mundo, o podemos verlo como un verdadero desafío”. Desde ese punto, el actor estadounidense condujo a la audiencia por un análisis directo sobre crisis política, liderazgo global y responsabilidad ciudadana.Gere, invitado del programa FIL Pensamiento, participó en la conferencia Compasión en acción: una custodia compartida del planeta que deja que la naturaleza y la comunidad nos muestre el camino, acompañado por la secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Alicia Bárcena. Ante un Auditorio Juan Rulfo abarrotado, la funcionaria abrió con una pregunta sobre la trayectoria del actor y el tránsito hacia su labor humanitaria. Él respondió con una reflexión sobre el tiempo, la transformación personal y la madurez espiritual. “Nada permanece igual. Todo está cambiando constantemente. A medida que envejezco, siento más profundamente dentro de mí esa sensación de madurez de que realmente no existo como parezco existir”.El eje político surgió cuando Bárcena mencionó la “realidad caótica, inestable e incierta” que atribuyó a la llegada de Donald Trump al poder en Estados Unidos. El actor tomó la palabra sin matices y dijo: “Como estadounidense, me avergüenzo profundamente de este presidente. No quiero que eso sea un aplauso, porque es un desafío para todos”. Y añadió una valoración sobre el escenario internacional al mencionar a “Orban, a Putin, a Netanyahu” como líderes con fuerte influencia sobre la configuración actual de tensiones globales.A partir de ese punto, el diálogo se desplazó hacia la noción de responsabilidad compartida. Gere sostuvo que estos “personajes deshonestos”, como los llamó, representan un reto para las sociedades y sus sistemas democráticos. “Es un reto para todos nosotros alzar la voz. Y ser considerados, ser responsables”. La discusión avanzó hacia la capacidad de los ciudadanos para enfrentar decisiones políticas que afectan a millones, especialmente cuando —según dijo— se promueve la idea de que individuos y comunidades están solos o debilitados. “Los malos quieren que te sientas pequeño. Quieren separarnos. Quieren que nos sintamos solos e impotentes, pero no estamos solos ni somos impotentes”.En esa línea, el actor abordó directamente los efectos que, a su juicio, han tenido las políticas recientes en Estados Unidos. “¿Cómo puedo tener un presidente que dice que el cambio climático es un engaño?… Lo que está haciendo ahora, abriendo tierras prístinas para vender derechos de gasolina y minerales, es una locura”. Además, se refirió al retroceso en programas de cooperación internacional que su país había sostenido durante décadas.El concepto de valentía fue insistente en su discurso. El actor describió la necesidad de “plantar cara en unidad con los demás”, no desde el odio sino desde la convicción ética. “No se trata de conseguir un arma como un terrorista… Se trata de plantar cara en unidad con los demás”. También retomó la metáfora del “jardín” como una imagen de construcción colectiva. “No se consigue el jardín a menos que se planten las semillas y se riegue. Se cuida. Esa es nuestra responsabilidad”.Bárcena retomó ese planteamiento para preguntar cómo reconstruir esperanza y herramientas emocionales ante la crisis global. Gere concluyó que la etapa actual es una oportunidad para replantear prioridades y compromisos. “Podemos crear el mundo que queremos… Ahora, el ingrediente que necesitamos es trabajar juntos”.SV