“Thunderbolts*”: Antihéroes… ¡Unidos!

Qué grata sorpresa ha resultado ser “Thunderbolts*” (así, con asterisco), el 36 largometraje del Universo Cinematográfico Marvel (UCM). En este relato serás testigo de la estridente llegada de un nuevo equipazo de superhéroes… o, mejor dicho, de antihéroes. El filme es divertido, aunque absurdo y caprichoso. Es la química del encantador elenco la que hace su magia para conquistar al espectador. No es perfecta, pero parece ser un paso en la dirección correcta: puedes esperar un filme entretenido, explosivo y palomero en el mejor de los sentidos.

El filme cierra la irregular Fase 5 de este corpus audiovisual, del cual muchos sólo recordarán con entusiasmo películas como “Deadpool & Wolverine” y “Guardianes de la Galaxia Vol. 3”, además de series como “Loki”, “Agatha All Along”, “Daredevil: Born Again” y hasta la animada “Your Friendly Neighborhood Spider-Man”. En mi caso, sí agregaría “Thunderbolts*” al listado de lo más destacado de la más reciente era marvelita. (Mención aparte merece “X-Men ’97”, indiscutible joya de la corona, pero que no forma parte del UCM).

Antes que nada, hay que establecer que esta es la película de Florence Pugh y su Yelena. La trama de “Thunderbolts*” gira en torno a ella, el vacío que le dejó la pérdida de su hermana y su búsqueda de sentido. El filme lo complementan dos líneas argumentales más: Una, al más puro estilo de “Guardianes de la Galaxia”, pues un grupo de inadaptados intentará (por las malas) funcionar como equipo.

La pandilla la integran U.S. Agent (Wyatt Russell), Ghost (Hannah John-Kamen), Red Guardian (David Harbour) y el Soldado del Invierno (Sebastian Stan), además de la ya citada Yelena y un tal Bob (Lewis Pullman). Sin inventar el hilo negro, Marvel vuelve a jugar la carta de la disfuncionalidad… ¡Y funciona! La dinámica entre estos atolondrados es graciosa y las personalidades se complementan.

La otra trama crucial se enfoca en el misterioso Bob y —para los ya iniciados en la mitología de los cómics— en el poderosísimo personaje conocido como Sentry, que en las historietas es famoso por su poder equiparable al de “un millón de soles explotando”.

Francamente, hay muchas cosas más que quisiera escribir sobre “Thunderbolts*”, pero todas son un spoiler en potencia. Creo que vale la pena que veas este filme con la mente tan “virgen” como sea posible, para que más adelante —si nos encontramos por ahí— podamos conversarlo como se debe.

Mientras nos preparamos para la Fase 6, que será inaugurada con la esperadísima “Los Cuatro Fantásticos”, lánzate a ver a los “Thunderbolts*”. Si sueltas el cuerpo, seguro que vas a reírte, emocionarte y a pasártelo bomba. Y recuerda que, como dicta la tradición, hay escena poscréditos. O, mejor dicho, dos escenas poscréditos.