Sorprenden con autocríticas
Para sorpresa de propios y extraños, en el Primer Informe de Actividades de la 63 Legislatura de Jalisco, los posicionamientos de las fracciones parlamentarias tuvieron toques de autocrítica. Casi todas las voces reconocieron pendientes y que se deben aspectos como la autonomía y el aseo de los procesos legislativos.
Aunque el Informe era de toda la Legislatura, el coordinador morenista, José María Martínez, parecía la quinceañera de la fiesta recibiendo todo tipo de felicitaciones (ayer finalizó como presidente de la Mesa Directiva). Hasta llegó más temprano para empezar la sesión 40 minutos tarde, lo que representa un récord en tiempos legislativos, pues lo “normal” es iniciar las reuniones con varias horas de retraso.
Le toca a la panista Mirelle Montes asumir la Presidencia del Congreso durante los siguientes seis meses. Y arranca con el tema del presupuesto estatal para el siguiente año.
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Mientras las fracciones del PRI y Hagamos cuestionaron el sometimiento del Congreso ante el Gobierno de Jalisco y la falta de contrapesos, el gobernador tiene otra visión. De visita en el recinto Legislativo afirmó que mantiene una relación respetuosa con las diputadas y los diputados. Pero pasó por alto pequeños detalles, como que en el Congreso sus propuestas e iniciativas han sido prioridad y se las aprueban sin mayores cambios.
Llamó la atención que el gobernador sólo estuvo presente durante el mensaje del presidente saliente de la Mesa Directiva y se retiró antes de que el resto de los grupos parlamentarios fijaran sus posturas.
Por lo pronto, el mandatario estatal confirmó que el 6 de noviembre, cuando presente su Cuarto Informe, sí escuchará los posicionamientos de los partidos.
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El que aplicó la técnica de Poncio Pilato y se lavó las manos fue el presidente del Poder Judicial de Jalisco, Daniel Espinosa Licón, quien evadió asumir responsabilidades en los señalamientos por despidos injustificados de personal en la Judicatura. El magistrado argumentó cosas como que se trata de un tema administrativo entre los consejeros Iván Novia y José de Jesús Becerra, pero no abundó sobre los cuestionamientos de que se trata de una ampliación del conflicto entre el gobernador y el Grupo Universidad.