Sheinbaum sí va contra el huachicol
En su reiterada retórica de la cuarta transformación que significaba su Gobierno, y que buena parte de la población le creyó, el ex presidente Andrés Manuel López Obrador machacaba que la máxima de él y de los que creían en su movimiento era la de “no mentir, no robar, y no engañar” al pueblo de México.
La más reciente prueba de que rompió e incumplió el principio de no mentir, es el crecimiento exponencial no sólo del robo de los ductos de Pemex a través de ordeñas cada vez menos clandestinas, por estar a la vista de todos, conocido como huachicoleo, sino su sofisticación para elevar el tráfico de hidrocarburos en detrimento de la ya desfondada industria petrolera mexicana con el llamado huachicol fiscal.
Habrá que recordar que la genialidad comunicativa que le resultó a AMLO su rueda de prensa mañanera, en la que con tan sólo expresar que él “tenía otros datos” ignoraba y se sacudía contundentes críticas a su administración, el primer gran tema fue el combate al huachicol.
Debo confesar, y así lo dejé escrito en diciembre de 2018 y los primeros meses del 2019, que apostar por acabar con ese gran robo a la nación y perseguir a los grupos de la delincuencia organizada coludidos con altos funcionarios de Pemex, y autoridades y sus policías federales y locales, era un gran acierto para el Gobierno lopezobradorista que recién iniciaba.
Hoy se sabe que aquello fue solo una burla demagógica presidencial y que no se erradicó el 97% de las ordeñas a los ductos de Pemex como aseguró el último día de su gobierno, sino que crecieron los asaltos en las plantas en altamar, y ahora nos enteramos, que había también toda una trama de corrupción “plus”, para importar millones y millones de litros de hidrocarburos para alimentar un mercado negro que enriqueció a los marinos encargados de las aduanas, a altos funcionarios federales, locales y hasta municipales (ahí está el caso del hermano y el sobrino del alcalde detenido de Teuchitlán, José Ascención Murguía Santiago) y desde luego mandos castrenses y policiales de los tres niveles de Gobierno.
Sin presentarlo como su bandera o causa principal como lo hizo AMLO al arranque de su Gobierno, en el mes 10 que corre de la Administración de la Presidenta Claudia Sheinbaum, se han incautado ya 69 millones de litros de hidrocarburos, más de los casi 50 millones que se lograron en todo el sexenio pasado. La cifra récord de la Presidenta proviene del huachicoleo tradicional, pero principalmente del huachicoleo fiscal, en donde el gabinete de seguridad, encabezado por Omar García Harfuch, ha dado los mayores golpes decomisando buques, carrotanques de ferrocarril y cientos de tráileres desarticulando toda la logística de estos grupos criminales.
Así, sin cacarearlo, Sheinbaum sí está convertida en la Presidenta antihuachicol, que habrá que ver si cómo dijo, llega de verdad a detener a todos los implicados “hasta donde tope”.