Gimnasia acuática
El agua es una técnica de gimnasia, su efecto se basa en que la fuerza y la actividad muscular se ven modificadas por la diferente resistencia externa al movimiento. Favorece la realización de determinados ejercicios y la relajación en diversos grupos musculares.
Este tipo de gimnasia se considera aeróbica, por el alto consumo de oxigeno que requiere mientras se ejecuta. Favorece también, el desarrollo y fuerza muscular, además de que ayuda a perder peso y estiliza la figura.
Hacer ejercicio en el agua es, además de divertido, menos pesado y se obtienen los mismos resultados: mejora la salud, fortalece el organismo, facilita la pérdida de peso y estiliza la figura.
Sus fundamentos se basan en que el ejercicio en el agua proporciona movimientos continuos consiguiendo un efecto “fitness”, efecto realizado por músculos y articulaciones que luchan contra la resistencia del agua, provocando que las necesidades de oxigeno se eleven y el corazón y los pulmones se vean obligados a realizar un trabajo y esfuerzo continuo.
Efectos sobre el organismo
La gimnasia acuática estimula la irrigación sanguínea y la oxigenación de los tejidos, mejora el trabajo del corazón y aumenta la capacidad vital de los pulmones. Otro de los efectos benéficos que se obtienen con la gimnasia acuática, es la adquisición de la elasticidad en el tejido muscular, produciendo una relación psíquica posterior. La pérdida de peso al realizar este ejercicio es evidente, pues en cada ocasión que se practica se consumen alrededor de 700 calorías por hora.
En todas aquellas personas que tienen alguna afección en: la columna vertebral, caderas y articulaciones de las extremidades inferiores este tipo de ejercicio es muy efectivo debido a que no necesitan apoyarse.
El agua influye sobre los músculos de dos formas distintas, afectando su rendimiento, resistencia que ofrece a los movimientos y el aumento de la superficie de roce que permite graduar el esfuerzo, lo cual proporciona un enérgico masaje sobre las zonas sumergidas.
Recordemos que nuestro cuerpo pesa menos dentro del agua, las articulaciones y la columna se relajan, los músculos postulares y de apoyo no se contraen y se usan con más intensidad. Los ejercicios dentro del agua se pueden realizar en el mar o en la piscina, en esta última se efectúan con mayor comodidad, se pueden realizar flotando o tomados del borde.
Para ejercitar el abdomen y las caderas se debe apoyar la espalda y con los brazos al borde de la piscina pedalear hacia adelante y hacia atrás. Otro tip importante es el de flexionar las piernas tocando el pecho con las rodillas, luego extenderlas hacia adelante en ángulo recto.
La gimnasia acuática, mejor conocida como acuaeróbics, se puede practicar a cualquier edad, no queremos ser grandes nadadoras, nuestro fin es sobre todo la salud y belleza, para con ello obtener nuestra propia medalla olímpica personal.
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