Ideas

El incomprendido boom feminista

El crecimiento del movimiento colectivo y plural de organizaciones feministas contra el creciente problema de la violencia contra las mujeres, en todas sus modalidades como la discriminación, el acoso y su expresión extrema como el feminicidio, que tendrá un momento de máxima visibilidad en las marchas del próximo 8 de marzo y el paro nacional del día siguiente en el marco del Día Internacional de la Mujer, parece ir en aumento directamente proporcional al empequeñecimiento de las respuestas y la ausencia de estrategias de los tres niveles de gobierno que siguen sin estar a la altura de las exigencias.

Aunque ha tratado de corregir y moderar sus desafortunadas posturas ante esta problemática y las demandas de sus víctimas, el Presidente Andrés Manuel López Obrador sigue viendo detrás de este movimiento amplio y con causas urgentes de atención y con plena legitimidad, a los conservadores que se quieren “disfrazar” de feministas cuando son “los verdaderos” machistas. Un reproche que de poco ayuda y que lo regresa a aquella expresión de que los feminicidios eran producto del neoliberalismo.

Esta interpretación parece haber provocado que el gobierno federal no ejerza su liderazgo y apoyo a los gobiernos estatales y de los municipios, para ajustar sus políticas públicas y sus principales instrumentos como las alertas de género y las órdenes de protección, que evidentemente están lejos de ser efectivos para proteger a las mueres amenazadas. Prueba de ello es que en Jalisco el número de feminicidios subió de 32 a 57 del 2018 al 2019, y al paso que vamos en estos primeros dos meses del año la tragedia podría ser mayor al final del 2020.

Ante esta especie de parálisis gubernamental, ojalá la creciente convocatoria y simpatía a este movimiento sin cabezas ni liderazgos visibles sean un revulsivo para impulsar verdaderos modelos de gobernanza en los que los gobiernos se abran a propuestas de solución de afectadas y expertos en el tema, tan despreciados en los gobiernos de hoy.

Sólo de esa forma se honrará la lucha de las muy combativas feministas de hoy y las que desde hace generaciones iniciaron la batalla para lograr la primera declaración de los Derechos de la Mujer y de la Ciudadanía en Francia, en 1791, en la búsqueda de la igualdad de derechos entre hombres y mujeres, y la instauración del Día Internacional de la Mujer desde 1911 en memoria de las 140 costureras que murieron en Nueva York en un incendio de la fábrica de camisas Triangle Shirtwaist, que reveló cómo persistía la opresión y desigualdad contra la mujer.

Desde luego esta evolución ha sido desigual en los distintos países del mundo, y desafortunadamente en México el paso ha sido muy lento. Sin duda una condición que es el resorte para este gran boom feminista que marcará el marzo que viene.

jbarrera4r@gmail.com
 

Temas

Sigue navegando