¿Dónde se comen los platillos de Navidad más raros del mundo?
¿Pancita de res? ¿Gusanitos? ¿Sosa cáustica con agua? No te espantes con los platillos que aún faltan por nombrar
¿Sabías que existen platillos navideños extremadamente extraños en diferentes partes del mundo? Más allá del clásico pavo relleno, el tradicional bacalao a la vizcaína, la ensalada de manzanita; hay recetas que resultan verdaderamente desconcertantes.
En algunos rincones de nuestro planeta, ingredientes como químicos de limpieza, gusanos y vísceras se convierten en parte esencial de los platillos navideños más extraños. No te preocupes, no son platillos mortíferos y, al final de todo, enriquecen nuestra muy singular gastronomía humana.
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Lista de platillos raros
Lutefisk
- Este plato tradicional de Suecia y Noruega consiste en bacalao seco que se rehidrata utilizando sosa cáustica y agua fría. Su textura gelatinosa y su fuerte olor amoniacal lo convierten en una delicia adquirida por muchos.
Gusanos fritos
- En regiones de Sudáfrica, los gusanos fritos son un plato navideño común. Estos insectos se preparan de diversas formas y son considerados una delicia local.
Slamahove
- En Noruega, este platillo se elabora a partir de la cabeza de un cordero cocida, servida con mejillas y cerebro. Su preparación es tan peculiar como su sabor.
Mondongo
- Muy popular en República Dominicana, este guiso navideño se hace con estómago de res. Es un platillo muy querido durante las festividades.
Selyodka pod Shouboy
- También conocido como “arenque bajo un abrigo de piel”, este plato en capas incluye betabel, papas y mayonesa. Si bien es una tradición en Rusia, su combinación de sabores puede ser inusual para muchos.
Pollo frito
- De todos los platos en la lista, este es el más normalito. En Japón, la cadena de comida rápida Kentucky Fried Chicken (KFC) saca en temporadas navideñas una receta secreta que hace que las personas se formen durante largas horas para probarla.
Tales platillos son una muestra de la diversidad culinaria que tenemos, no es de extrañar; los humanos tendemos a lo raro, sin embargo, algunas de estas preparaciones podrían sorprender incluso a los más aventureros comensales.
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AO