Banxico: ¿Qué representa la disminución de su tasa de interés?
Esta decisión se tomó ante señales de desaceleración económica a nivel global durante el primer trimestre del año
El Banco de México anunció una reducción en su tasa de interés de referencia, bajándola de 8.75% a 8.50%, medida que será efectiva a partir del viernes 16 de mayo de 2025.
Esta decisión se tomó ante señales de desaceleración económica a nivel global durante el primer trimestre del año, lo que motivó al banco central a relajar ligeramente su política monetaria para evitar un mayor enfriamiento de la economía nacional.
La baja en la tasa busca equilibrar dos objetivos: controlar la inflación sin frenar aún más el crecimiento económico.
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Para los ciudadanos, esto podría traducirse en condiciones más accesibles para adquirir créditos personales, hipotecarios o automotrices, ya que los bancos suelen ajustar sus tasas conforme al referente de Banxico. Por otro lado, los rendimientos de inversiones a tasa fija o cuentas de ahorro podrían disminuir como consecuencia de esta medida.
El entorno económico sigue marcado por incertidumbre. Las recientes tensiones comerciales y las perspectivas internacionales fueron factores clave en la decisión del banco. A nivel interno, la economía mexicana mostró una débil recuperación en los primeros tres meses del año, con una expansión apenas del 0.2% trimestral, tras una contracción previa.
Desde la última reunión de política monetaria, las tasas de interés en valores gubernamentales han caído, especialmente en plazos cortos y medianos. Aunque el peso mexicano ganó algo de valor, persisten riesgos que pueden afectar tanto el tipo de cambio como la inflación.
En abril, la inflación general se ubicó en 3.93%, mientras que la subyacente permaneció por debajo del 4% por octavo mes consecutivo, aunque con un leve repunte. Banxico prevé que la inflación converja a su meta del 3% hacia el tercer trimestre de 2026, aunque reconoce que el panorama está sujeto a riesgos.
Entre los factores que podrían elevar la inflación están posibles depreciaciones del peso, conflictos geopolíticos o disrupciones en el comercio global.
En contraste, una actividad económica más débil o un traspaso limitado de costos a los precios podrían favorecer una menor presión inflacionaria. A nivel global, la inflación empieza a moderarse, aunque persisten riesgos por tensiones externas y volatilidad financiera.
Lee aquí el comunicado completo: https://www.banxico.org.mx/canales/%7BB0E67419-19C8-5893-D1C4-2426F165965A%7D.pdf
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