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Té helado, recomendable para este verano
Calma tu sed con una bebida diferente, deliciosa y muy fresca
CIUDAD DE MÉXICO (24/JUL/2014).- Este verano calma tu sed con una
bebida diferente. ¿Qué te parecería disfrutar de una amplia variedad de sabores y aromas que tiene el té helado para ti?.
Sin duda el té es una de las bebidas naturales más rica y refrescante, que resulta ideal para esta temporada, en donde el calor nos obliga a mantenernos hidratados por eso, qué mejor que sea con tragos sin tanta azúcar y químicos.
El té helado es servido a menudo con hielos, con helado o simplemente frío, todo depende los gustos de cada persona.
También se utilizan infusiones, sodas o frappés para disfrutar algunas variantes de este tipo de bebidas heladas y deliciosas.
Es aconsejable permitir que la infusión se enfríe a temperatura ambiente antes de hacer té helado, ya que de lo contrario es muy posible que se formen condensados, lo que daría al té un aspecto lechoso, y un sabor ligeramente ácido.
El té caliente puede ser vertido sobre un vaso con hielo para adquirir la baja temperatura que buscamos. Asimismo, en ocasiones suele servirse acompañado por algunas hojas de menta o por rodajas de limón, es sólo cuestión de gustos.
Propiedades maravillosas
“Sólo superada por el agua, el té es la segunda bebida más consumida en el mundo. Negro, blanco, verde, amarillo, oolong o pu-erh, todos provienen de la misma planta, la camellia sinesis. La planta de té es nativa de Asia y puede crecer en climas tropicales o subtropicales.
“Dependerá del momento de recolección, tipo de hojas, de su proceso de secado, almacenamiento u origen, para que el té obtenga sus diferentes denominaciones pero, fuera de aquellas infusiones que se hacen con camellia sinesis, todas son tisanas herbales o frutales, incluidos el rooibos y la yerba mate”, señala Eugenio Larrínaga Laborín, socio fundador de Tomás Casa Editora de Té.
En cuanto a las recomendaciones para los interesados en descubrir el asombroso mundo de este trago, comenta:
“El té puro no es muy recomendable para personas que comienzan a beberlo, pues los sabores son muy delicados, recordemos que en México estamos acostumbrados a beber café y su sabor es más fuerte que el del té, entonces recomendaríamos comenzar con sabores muy frutales: la jamaica, mora y las fresas son muy buenas opciones, conforme tu paladar se va acostumbrando a percibir las hojas de cada infusión éste puede irse volviendo más sensible al sabor de los tés puros”, indica el experto.
El té tiene tres componentes primarios que son: cafeína, polifenoles y aceites esenciales; estos últimos determinan los aromas y sabores. Los polifenoles, además de contribuir con grandes beneficios, como su poder anticancerígeno, son los responsables de la astringencia o vivacidad de su sabor, mientras la cafeína actúa como estimulante natural, eliminando la somnolencia.
Bebida histórica
Durante la primera mitad del siglo XIX, cuando el té se servía frío, se consideraba como un ponche de té, y generalmente se le añadía algo de alcohol para su consumo.
Estos ponches tenían nombres como: ponche del regente (regent’s Punch), ponche de Charleston’s Saint Cecilia y ponche Chatham Artillery.
Los tés helados se hacen famosos en el año 1904, durante la Exposición Mundial de Saint Louis, en la cual Richard Blechynden, dueño de una plantación de té, introduce el “Ice Tea” ó té con hielo para refrescar a los visitantes de la feria.
La leyenda cuenta que el señor Blechynden ofrecía su té a los visitantes de la feria, quienes no lo aceptaban, dado el calor de ese año. Cómo último intento, Richard Blechynden añadió un cubito de hielo en el té caliente y lo convirtió en “Ice Tea”, refrescando así a los visitantes de la feria.
Otras versiones aseguran que el té frío no se inventó en la feria mundial. Los ciudadanos del sur lo servían frío en sus casas mucho antes de la feria. Simplemente se popularizó en la feria. Se le llamaba té dulce servido en frío y no en caliente durante los veranos en el sur.
El hielo se le añadía si en la casa había, ya que hay que recordar que hielo era un lujo antes de que existiera el refrigerador.
Actualmente, son cada vez más las marcas y establecimientos que le están apostando a la industria del té y que han empezado a desarrollar los blends locales, con aromas y sabores propios.
Sin duda el té es una de las bebidas naturales más rica y refrescante, que resulta ideal para esta temporada, en donde el calor nos obliga a mantenernos hidratados por eso, qué mejor que sea con tragos sin tanta azúcar y químicos.
El té helado es servido a menudo con hielos, con helado o simplemente frío, todo depende los gustos de cada persona.
También se utilizan infusiones, sodas o frappés para disfrutar algunas variantes de este tipo de bebidas heladas y deliciosas.
Es aconsejable permitir que la infusión se enfríe a temperatura ambiente antes de hacer té helado, ya que de lo contrario es muy posible que se formen condensados, lo que daría al té un aspecto lechoso, y un sabor ligeramente ácido.
El té caliente puede ser vertido sobre un vaso con hielo para adquirir la baja temperatura que buscamos. Asimismo, en ocasiones suele servirse acompañado por algunas hojas de menta o por rodajas de limón, es sólo cuestión de gustos.
Propiedades maravillosas
“Sólo superada por el agua, el té es la segunda bebida más consumida en el mundo. Negro, blanco, verde, amarillo, oolong o pu-erh, todos provienen de la misma planta, la camellia sinesis. La planta de té es nativa de Asia y puede crecer en climas tropicales o subtropicales.
“Dependerá del momento de recolección, tipo de hojas, de su proceso de secado, almacenamiento u origen, para que el té obtenga sus diferentes denominaciones pero, fuera de aquellas infusiones que se hacen con camellia sinesis, todas son tisanas herbales o frutales, incluidos el rooibos y la yerba mate”, señala Eugenio Larrínaga Laborín, socio fundador de Tomás Casa Editora de Té.
En cuanto a las recomendaciones para los interesados en descubrir el asombroso mundo de este trago, comenta:
“El té puro no es muy recomendable para personas que comienzan a beberlo, pues los sabores son muy delicados, recordemos que en México estamos acostumbrados a beber café y su sabor es más fuerte que el del té, entonces recomendaríamos comenzar con sabores muy frutales: la jamaica, mora y las fresas son muy buenas opciones, conforme tu paladar se va acostumbrando a percibir las hojas de cada infusión éste puede irse volviendo más sensible al sabor de los tés puros”, indica el experto.
El té tiene tres componentes primarios que son: cafeína, polifenoles y aceites esenciales; estos últimos determinan los aromas y sabores. Los polifenoles, además de contribuir con grandes beneficios, como su poder anticancerígeno, son los responsables de la astringencia o vivacidad de su sabor, mientras la cafeína actúa como estimulante natural, eliminando la somnolencia.
Bebida histórica
Durante la primera mitad del siglo XIX, cuando el té se servía frío, se consideraba como un ponche de té, y generalmente se le añadía algo de alcohol para su consumo.
Estos ponches tenían nombres como: ponche del regente (regent’s Punch), ponche de Charleston’s Saint Cecilia y ponche Chatham Artillery.
Los tés helados se hacen famosos en el año 1904, durante la Exposición Mundial de Saint Louis, en la cual Richard Blechynden, dueño de una plantación de té, introduce el “Ice Tea” ó té con hielo para refrescar a los visitantes de la feria.
La leyenda cuenta que el señor Blechynden ofrecía su té a los visitantes de la feria, quienes no lo aceptaban, dado el calor de ese año. Cómo último intento, Richard Blechynden añadió un cubito de hielo en el té caliente y lo convirtió en “Ice Tea”, refrescando así a los visitantes de la feria.
Otras versiones aseguran que el té frío no se inventó en la feria mundial. Los ciudadanos del sur lo servían frío en sus casas mucho antes de la feria. Simplemente se popularizó en la feria. Se le llamaba té dulce servido en frío y no en caliente durante los veranos en el sur.
El hielo se le añadía si en la casa había, ya que hay que recordar que hielo era un lujo antes de que existiera el refrigerador.
Actualmente, son cada vez más las marcas y establecimientos que le están apostando a la industria del té y que han empezado a desarrollar los blends locales, con aromas y sabores propios.