Armonía en tu piel

El secreto para una vida sana

Dra. Carmen Covarrubias • 36 11 07 88
carmencog@yahoo.com.mx

El secreto para una vida sana está en las células y en su ADN. Para un programa de prevención del envejecimiento así como de las enfermedades degenerativas crónicas y el cáncer, radica en conocer el funcionamiento de todas las células del cuerpo y aprender a cuidarlas.
Las células son el elemento constitutivo de los tejidos y órganos del cuerpo, las cuales tienen capacidad de dividirse y generar en cada división células iguales, que cuando se pierde o se altera dicha función, repercutirá en envejecimiento prematuro y en algunas enfermedades.
Todas las células están constituidas por una membrana que las rodea, un núcleo donde se guarda el ADN, que es el soporte de la estructura genética donde radica la información de los genes de cada persona, siendo los principales responsables de las funciones de la célula.
En el ADN radica la capacidad de reproducción de las células, las cuales tienen organelos como las mitocondrias, que son el punto principal donde se produce la energía.
Al cuidar las células, el resultado será tener mucha energía, vitalidad, defensas inmunológicas, buena memoria, salud mental y hormonas en armonía. Con resultados no solo internos en todos los tejidos y órganos, sino también externos con una imagen saludable.
Para un buen funcionamiento de las células se requiere consumir nutrientes de alta calidad, tener un intestino en buen estado que permita la  absorción de los nutrientes así como tener una flora en armonía. También se requiere que el hígado y riñones trabajen con una óptima función removiendo moléculas tóxicas del organismo.
La dieta de alta calidad radica en el consumo de productos frescos, en la que predominen verduras y frutas, productos de origen animal bajos en grasa, carbohidratos de bajo índice glicémico, grasas buenas como el omega-3, productos de fácil digestión y cocinados lentamente, no comer frituras ni productos que puedan inflamar la mucosa del intestino. Evitar consumir productos contaminados con pesticidas y metales así como los altamente industrializados.
El hábito de consumir alimentos con dichas características beneficia al cuerpo interior y exterior previniendo el estrés oxidativo, que es el principal elemento en la presentación del envejecimiento prematuro, las enfermedades degenerativas crónicas y los tumores malignos.
Cuando se daña el ADN de las células, pierden su función, su arquitectura y su capacidad de reproducción, dando como resultado la enfermedad. Por eso es tan importante mantener las células en óptimas condiciones.
Detoxificar las células es detoxificar el organismo entero.
Actualmente, las estrategias anti-edad se basan principalmente en el conocimiento de las funciones de cada parte del cuerpo y prevenir sus disfunciones, sobre todo la de la mucosa intestinal. Con el mantenimiento de la integridad de la mucosa intestinal se favorece una buena función del sistema inmunológico y cerebral. Con todo esto se puede evitar la auto-inmune respuesta, que es el lado no bueno del sistema inmunológico.
En conclusión, tener sanas las células del cuerpo y su ADN es tener sana la vida.