En realidad escribimos el título de la presente colaboración para retomar el tema de las enfermedades de las plantas en cultivo. Tema que a manera de serial aunque interrumpido, consideramos no pierde su actualidad y, si bien es cierto, que la descripción no puede ser tan amplia como quisiéramos en función a los espacios, también es cierto que, durante la temporada lluviosa proliferan las familias de hongos patógenos y a la vez, así mismo pueden presentar varias generaciones durante los diversos ciclos biológicos de los cultivos hechos bajo el régimen lluvioso.
Hemos mencionado en anteriores colaboraciones que: más cultivos o cosechas se pierden por ataque de hongos que, por invasión de insectos; hongos e insectos junto a algunas bacterias y virus se consideran “plagas”. Aunque, debemos aclarar que en cada caso en donde se presenta el conflicto la solución puede ser compleja por causas muy ajenas al productor. Sin embargo en tratándose de los insectos estos, se mencionan en las etiquetas del producto comercial en venta, así sea de una manera somera o, un tanto incompleta para el interés del agricultor. Inclusive algunas empresas que manejan insecticidas llevan impresos la figura o fotografía de insectos que atacan determinados cultivos. La información pues, no nos llega tan amplia como quisiéramos cuando tenemos el problema.
Tratando de entender las enfermedades o, ciertas enfermedades que pueden presentarse en nuestros cultivos bien podemos interesarnos en conocer más del mundo de los hongos. Estos de una manera universal y sin perjuicio de los géneros y familias tienen hábitats un tanto específicos y selectivos; todo depende la fase biológica en que se encuentre y ahí lo tenemos atacando los tejidos del vegetal desde la raíz, hasta la flor y los frutos.
Las condiciones para que las plagas, así, haciéndonos responsables del término generalizado, se dan con la humedad, el calor y el sustrato; este último que es de donde toman su alimento y que es variado. Inclusive, están los saprofitos que dependen de la materia muerta. Como es lógico el ataque de hongo puede darse desde la siembra o trasplante, toda vez que muchos de estos organismos viven a ras del suelo; sin embargo los hay que habitan en el entorno del sistema radicular.
Estos microorganismos nocivos pueden vivir por muchos años, como también lo pueden hacer en temperaturas rondando los 50º C bajo cero. Por supuesto no a todas las familias de hongos patógenos tienen esas características, pues los hay que mueren después de los 40º C sobre cero. Es así pues que retomamos la exposición que lleva muchas, pero muchas de las experiencias de campo vividas en diversos cultivos y por más de cinco décadas de ejercicio profesional.
Antes, debemos poner en claro que, con la tecnología actual misma que incluye pequeños laboratorios de campo, le es más fácil el acceso al conocimiento del tema al agricultor común y requisito válido, es su interés en el conocimiento que lo lleve a proteger su inversión.
TIPOS DE HONGOS
Los hongos son organismos semejantes a las plantas en muchos aspectos, pero que difieren prácticamente de todas ellas en que crecen de clorofila. Son plantas no vasculares y a menudo tienen forma filamentosa(a manera de hilillos). Tipos más complejos de hongos representan una agregación de estos filamentos fúngicos (¿fungosos?). Las paredes de las células o de los filamentos generalmente tienen celulosa, quitina o ambas sustancias. En cierto momento del ciclo biológico de los hongos se producen esporas (igual a semillas). Los hongos incluyen formas unicelulares así como tipos más complejos. Los ciclos biológicos de muchos de ellos se parecen a los de ciertas algas, aunque con ello no queremos decir que todos los hongos tengan ciclos biológicos algáceos. Además, como sucede en ciertas algas y en las plantas terrestres, muchos hongos poseen fases citológicas alternantes (células modificándose); Las plantas con núcleos haploides siguen a las que tienen otros estados cromosómicos, y estos estados, a su vez pueden seguir a la fase haploide. En los diferentes grupos de hongos difiere el desarrollo relativo de cada fase citológica. En razón a esto es que los técnicos así como los productores avanzados debemos aplicar los criterios respecto de cada caso en particular, con el objetivo de utilizar el antídoto adecuado.
Aunque es un clara posibilidad el que cuando menos algunos hongos estén muy relacionados con las algas, la evolución subsecuente de los dos grupos ha seguido rutas muy divergentes. Las algas, en general, están adaptadas a un medio ambiente acuático y dependen de este como fuente de nutrientes, de materia prima para la fotosíntesis y como medio para llevar a cabo los procesos reproductores.
MÁS CLARO
Debido a su naturaleza acrofílica (que no poseen clorofila), los hongos se han adaptado en diferentes líneas. Dependen –como hemos dicho- de ciertos substratos para su alimentación, y aún las formas acuáticas, aunque son muy parecidas a las algas, obtienen los materiales alimenticios necesarios de una manera completamente distinta.
Algunos hongos tienen la capacidad de utilizar nutrimentos de la materia orgánica de su medio ambiente. Estos materiales orgánicos pueden estar en solución o ser capaz el hongo de tomar parte activa en su degradación, convirtiendo en alimento accesible a sustancias que originalmente se encontraban en estado insoluble. Hacemos una repetición recordando que los hongos que existen sobre sustratos no vivos se conocer y llaman saprofitos.
La fuente de su alimentación puede ser de tipos tan diversos como un tronco en putrefacción (madera podrida), una rebanada de pan, o inclusive un trozo de celofán.
Los parásitos, por otra parte invaden tejidos de organismos vivos y son a menudo responsables de las enfermedades de éstos. Ciertas formas parásitas pueden vivir pueden sobrevivir sobre materia orgánica no viva, mientras que otras son capaces de existir solamente cuando viven sobre otro organismo.
La mayoría de los hongos pueden reproducirse por medios tanto sexuales como asexuales; al respecto hay un consenso entre los microbiológos especializados en el que se propuso que algunos hongos en los cuales no se han observado los procesos sexuales, han sido agrupados en una categoría como “hongos imperfectos” (fungiimperfecti). La producción de esporas, que son transportadas por el aire, es una especialización muy favorable de los hongos. Es sabido comúnmente conocido el riesgo para los cultivos que presenta los nublados, “chipi-chipis” con cierto rango de temperatura, misma que desprenden los suelos y las malezas en el entorno de la cosecha. La mayoría de estos hongos existe en un medio terrestre y las esporas son dispersadas por el aire. Las esporas fúngicas se producen en grandes cantidades y son notablemente pequeñas y ligeras. Como resultado pues, podemos considerar que el aire esta lleno de esporas fúngicas flotantes que pueden retener su viabilidad (capacidad de reproducción) por largo tiempo y ser capaces de germinar en una gran variedad de lugares.
FUENTES DE ALIMENTO
Este grupo, que depende de fuentes externas de alimento, ha tenido una evolución muy diversificada cuyo resultado ha sido una amplia gama de tipos de cuerpos, procesos reproductores y asociaciones. Por tanto pues no podemos decir que ningún otro grupo importante en el reino vegetal ha alcanzado tal grado de diversificación. En ciertos casos, los filamentos fúngicos han invadido raíces de plantas superiores sin afectar seriamente al hospedero (la planta) y algunos han desarrollado una relación hospedero-parásito tan intrincada que ninguno de los dos organismos puede sobrevivir sin ella (un tipo de simbiosis). Un ejemplo de esto ultimo es la necesidad que tienen los embriones de las orquídeas (paleontológicamente un hongo) de tener dentro de sus células filamentos fúngicos que tienen una tarea en la digestión de los materiales alimenticios del suelo durante la germinación de las semillas de orquídeas.
Los hongos también pueden crecer en íntimas asociación con las algas y producir líquenes. La asociación es probablemente de tipo parasitario o de parte del hongo, pero sin embargo no es tan severa que pueda lesionar a las algas hospederas. Los líquenes pueden asumir la forma del hongo involucrado, aunque también podemos ver con alguna frecuencia cambios en las configuraciones, y reproducirse de la misma manera que el hongo.
Para nuestros amigos agricultores que a la vez tienen jardines en sus casas, deben saber que las condiciones climáticas de los últimos días de nublados y lluvias, propician condiciones excelentes para poblaciones multitudinarias de las diversas familias que atacan y producen enfermedades fungosas en los vegetales todos.
Hemos mencionado en anteriores colaboraciones que: más cultivos o cosechas se pierden por ataque de hongos que, por invasión de insectos; hongos e insectos junto a algunas bacterias y virus se consideran “plagas”. Aunque, debemos aclarar que en cada caso en donde se presenta el conflicto la solución puede ser compleja por causas muy ajenas al productor. Sin embargo en tratándose de los insectos estos, se mencionan en las etiquetas del producto comercial en venta, así sea de una manera somera o, un tanto incompleta para el interés del agricultor. Inclusive algunas empresas que manejan insecticidas llevan impresos la figura o fotografía de insectos que atacan determinados cultivos. La información pues, no nos llega tan amplia como quisiéramos cuando tenemos el problema.
Tratando de entender las enfermedades o, ciertas enfermedades que pueden presentarse en nuestros cultivos bien podemos interesarnos en conocer más del mundo de los hongos. Estos de una manera universal y sin perjuicio de los géneros y familias tienen hábitats un tanto específicos y selectivos; todo depende la fase biológica en que se encuentre y ahí lo tenemos atacando los tejidos del vegetal desde la raíz, hasta la flor y los frutos.
Las condiciones para que las plagas, así, haciéndonos responsables del término generalizado, se dan con la humedad, el calor y el sustrato; este último que es de donde toman su alimento y que es variado. Inclusive, están los saprofitos que dependen de la materia muerta. Como es lógico el ataque de hongo puede darse desde la siembra o trasplante, toda vez que muchos de estos organismos viven a ras del suelo; sin embargo los hay que habitan en el entorno del sistema radicular.
Estos microorganismos nocivos pueden vivir por muchos años, como también lo pueden hacer en temperaturas rondando los 50º C bajo cero. Por supuesto no a todas las familias de hongos patógenos tienen esas características, pues los hay que mueren después de los 40º C sobre cero. Es así pues que retomamos la exposición que lleva muchas, pero muchas de las experiencias de campo vividas en diversos cultivos y por más de cinco décadas de ejercicio profesional.
Antes, debemos poner en claro que, con la tecnología actual misma que incluye pequeños laboratorios de campo, le es más fácil el acceso al conocimiento del tema al agricultor común y requisito válido, es su interés en el conocimiento que lo lleve a proteger su inversión.
TIPOS DE HONGOS
Los hongos son organismos semejantes a las plantas en muchos aspectos, pero que difieren prácticamente de todas ellas en que crecen de clorofila. Son plantas no vasculares y a menudo tienen forma filamentosa(a manera de hilillos). Tipos más complejos de hongos representan una agregación de estos filamentos fúngicos (¿fungosos?). Las paredes de las células o de los filamentos generalmente tienen celulosa, quitina o ambas sustancias. En cierto momento del ciclo biológico de los hongos se producen esporas (igual a semillas). Los hongos incluyen formas unicelulares así como tipos más complejos. Los ciclos biológicos de muchos de ellos se parecen a los de ciertas algas, aunque con ello no queremos decir que todos los hongos tengan ciclos biológicos algáceos. Además, como sucede en ciertas algas y en las plantas terrestres, muchos hongos poseen fases citológicas alternantes (células modificándose); Las plantas con núcleos haploides siguen a las que tienen otros estados cromosómicos, y estos estados, a su vez pueden seguir a la fase haploide. En los diferentes grupos de hongos difiere el desarrollo relativo de cada fase citológica. En razón a esto es que los técnicos así como los productores avanzados debemos aplicar los criterios respecto de cada caso en particular, con el objetivo de utilizar el antídoto adecuado.
Aunque es un clara posibilidad el que cuando menos algunos hongos estén muy relacionados con las algas, la evolución subsecuente de los dos grupos ha seguido rutas muy divergentes. Las algas, en general, están adaptadas a un medio ambiente acuático y dependen de este como fuente de nutrientes, de materia prima para la fotosíntesis y como medio para llevar a cabo los procesos reproductores.
MÁS CLARO
Debido a su naturaleza acrofílica (que no poseen clorofila), los hongos se han adaptado en diferentes líneas. Dependen –como hemos dicho- de ciertos substratos para su alimentación, y aún las formas acuáticas, aunque son muy parecidas a las algas, obtienen los materiales alimenticios necesarios de una manera completamente distinta.
Algunos hongos tienen la capacidad de utilizar nutrimentos de la materia orgánica de su medio ambiente. Estos materiales orgánicos pueden estar en solución o ser capaz el hongo de tomar parte activa en su degradación, convirtiendo en alimento accesible a sustancias que originalmente se encontraban en estado insoluble. Hacemos una repetición recordando que los hongos que existen sobre sustratos no vivos se conocer y llaman saprofitos.
La fuente de su alimentación puede ser de tipos tan diversos como un tronco en putrefacción (madera podrida), una rebanada de pan, o inclusive un trozo de celofán.
Los parásitos, por otra parte invaden tejidos de organismos vivos y son a menudo responsables de las enfermedades de éstos. Ciertas formas parásitas pueden vivir pueden sobrevivir sobre materia orgánica no viva, mientras que otras son capaces de existir solamente cuando viven sobre otro organismo.
La mayoría de los hongos pueden reproducirse por medios tanto sexuales como asexuales; al respecto hay un consenso entre los microbiológos especializados en el que se propuso que algunos hongos en los cuales no se han observado los procesos sexuales, han sido agrupados en una categoría como “hongos imperfectos” (fungiimperfecti). La producción de esporas, que son transportadas por el aire, es una especialización muy favorable de los hongos. Es sabido comúnmente conocido el riesgo para los cultivos que presenta los nublados, “chipi-chipis” con cierto rango de temperatura, misma que desprenden los suelos y las malezas en el entorno de la cosecha. La mayoría de estos hongos existe en un medio terrestre y las esporas son dispersadas por el aire. Las esporas fúngicas se producen en grandes cantidades y son notablemente pequeñas y ligeras. Como resultado pues, podemos considerar que el aire esta lleno de esporas fúngicas flotantes que pueden retener su viabilidad (capacidad de reproducción) por largo tiempo y ser capaces de germinar en una gran variedad de lugares.
FUENTES DE ALIMENTO
Este grupo, que depende de fuentes externas de alimento, ha tenido una evolución muy diversificada cuyo resultado ha sido una amplia gama de tipos de cuerpos, procesos reproductores y asociaciones. Por tanto pues no podemos decir que ningún otro grupo importante en el reino vegetal ha alcanzado tal grado de diversificación. En ciertos casos, los filamentos fúngicos han invadido raíces de plantas superiores sin afectar seriamente al hospedero (la planta) y algunos han desarrollado una relación hospedero-parásito tan intrincada que ninguno de los dos organismos puede sobrevivir sin ella (un tipo de simbiosis). Un ejemplo de esto ultimo es la necesidad que tienen los embriones de las orquídeas (paleontológicamente un hongo) de tener dentro de sus células filamentos fúngicos que tienen una tarea en la digestión de los materiales alimenticios del suelo durante la germinación de las semillas de orquídeas.
Los hongos también pueden crecer en íntimas asociación con las algas y producir líquenes. La asociación es probablemente de tipo parasitario o de parte del hongo, pero sin embargo no es tan severa que pueda lesionar a las algas hospederas. Los líquenes pueden asumir la forma del hongo involucrado, aunque también podemos ver con alguna frecuencia cambios en las configuraciones, y reproducirse de la misma manera que el hongo.
Para nuestros amigos agricultores que a la vez tienen jardines en sus casas, deben saber que las condiciones climáticas de los últimos días de nublados y lluvias, propician condiciones excelentes para poblaciones multitudinarias de las diversas familias que atacan y producen enfermedades fungosas en los vegetales todos.