México
Semarnat alerta por aumento de contaminación
La polución en el país dobla los límites establecidos por la EPA y la OMS
CIUDAD DE MÉXICO (28/JUL/2013).- En México la concentración máxima de partículas suspendidas en la atmósfera supera el doble establecido por la Agencia para la Protección del Ambiente de Estados Unidos (EPA, por sus siglas en inglés) y más del doble permitido por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
De acuerdo con la Guía Metodológica para la estimación de emisiones, elaborada por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), “se observa que el límite para la concentración promedio de 24 horas en México es casi el doble del establecido por la EPA, y ese valor se agranda más si se compara con los límites establecidos por la OMS”.
Advierte que la exposición a estos contaminantes puede tener efectos en la salud, como daño en el tracto respiratorio, e incrementar —cuando entran al sistema sanguíneo— el riesgo de embolia o infarto, además desacelerar la aterosclerosis.
La principal fuente contaminante de estas partículas, se explica en el documento, son los vehículos que utilizan diesel como combustible; además de los vehículos a gasolina, la industria y la minería.
“Estas partículas tienen un efecto mayor en la salud humana debido principalmente a su composición, que puede ser más tóxica y se caracteriza principalmente por la presencia de sulfatos, nitratos, ácidos, metales y carbono negro; este último contaminante se origina en las diferentes categorías de fuentes de emisión que implican la quema incompleta de combustibles, y su presencia en las partículas incrementa considerablemente su toxicidad”, dice.
El documento señala que la contaminación atmosférica es vista en México como un problema local, ya que se manifiesta principalmente en las grandes ciudades: “Sin embargo, se han evidenciado los efectos de la contaminación del aire, que además de su impacto local tienen un efecto regional y global”.
Detalla que esta contaminación se manifiesta con sequías prolongadas, episodios de inundaciones derivadas de lluvias intensas y nevadas severas.
La contaminación atmosférica, debido a la presencia de partículas suspendidas —agrega— no sólo tiene un efecto en la salud humana, sino que también puede provocar un efecto negativo sobre el medioambiente, como la afectación de la visibilidad, el balance radiactivo de energía, relacionado con el cambio climático.
“Muchos de los efectos más importantes que tienen las partículas se presentan precisamente en el suelo, ya que alteran los procesos de flujo de energía y el ciclo de nutrientes, inhiben la toma de nutrientes, cambian la estructura del ecosistema y, sobre todo, afectan a su biodiversidad”, argumenta.
De acuerdo con la Guía Metodológica para la estimación de emisiones, elaborada por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), “se observa que el límite para la concentración promedio de 24 horas en México es casi el doble del establecido por la EPA, y ese valor se agranda más si se compara con los límites establecidos por la OMS”.
Advierte que la exposición a estos contaminantes puede tener efectos en la salud, como daño en el tracto respiratorio, e incrementar —cuando entran al sistema sanguíneo— el riesgo de embolia o infarto, además desacelerar la aterosclerosis.
La principal fuente contaminante de estas partículas, se explica en el documento, son los vehículos que utilizan diesel como combustible; además de los vehículos a gasolina, la industria y la minería.
“Estas partículas tienen un efecto mayor en la salud humana debido principalmente a su composición, que puede ser más tóxica y se caracteriza principalmente por la presencia de sulfatos, nitratos, ácidos, metales y carbono negro; este último contaminante se origina en las diferentes categorías de fuentes de emisión que implican la quema incompleta de combustibles, y su presencia en las partículas incrementa considerablemente su toxicidad”, dice.
El documento señala que la contaminación atmosférica es vista en México como un problema local, ya que se manifiesta principalmente en las grandes ciudades: “Sin embargo, se han evidenciado los efectos de la contaminación del aire, que además de su impacto local tienen un efecto regional y global”.
Detalla que esta contaminación se manifiesta con sequías prolongadas, episodios de inundaciones derivadas de lluvias intensas y nevadas severas.
La contaminación atmosférica, debido a la presencia de partículas suspendidas —agrega— no sólo tiene un efecto en la salud humana, sino que también puede provocar un efecto negativo sobre el medioambiente, como la afectación de la visibilidad, el balance radiactivo de energía, relacionado con el cambio climático.
“Muchos de los efectos más importantes que tienen las partículas se presentan precisamente en el suelo, ya que alteran los procesos de flujo de energía y el ciclo de nutrientes, inhiben la toma de nutrientes, cambian la estructura del ecosistema y, sobre todo, afectan a su biodiversidad”, argumenta.