Jalisco
Suben plagios cometidos por menores
Delitos de alto impacto, como homicidios y portación de armas de fuego, también registraron un alza en el sexenio pasado
GUADALAJARA, JALISCO (05/JUL/2013).- El número de secuestros cometidos en Jalisco por menores de edad se incrementó durante el sexenio pasado: mientras que entre todos los años de 2007 a 2011 se acumularon nueve casos, tan sólo en 2012 se registraron 11, según datos obtenidos a través de la Unidad de Transparencia de la Fiscalía General del Estado (FGE).
Otros delitos de alto impacto registran también tendencia al alza. Los homicidios, en el mismo periodo, aumentaron 40%, al pasar de 37 a 52 casos, aunque de hecho tuvieron su punto más alto en 2011, con 53 asesinatos.
Los casos de portación de armas de fuego prohibidas fueron 18 sólo en 2012, mientras que en los cinco años anteriores se acumularon 10 casos. En contraste, los menores procesados por delitos contra la salud se redujeron en el mismo periodo: pasaron de 71 en 2007 a 33 en 2012.
La información de la Fiscalía registra delitos cometidos por menores de edad solamente para el primer trimestre de 2013: siete secuestros, nueve homicidios y una detención por tener armas para uso exclusivo del Ejército.
Los menores de edad inculpados son remitidos al Centro de Observación, Clasificación y Diagnóstico del Estado de Jalisco, conocido como Tutelar, pues, de acuerdo con la Ley de Justicia Integral para Adolescentes del Estado de Jalisco, las penas máximas que pueden obtener son hasta de siete años de internamiento, con miras a su reintegración social y familiar.
Sin embargo, casos como el de Luis Antonio Ortiz y Andrés Barba, los adolescentes que fueron asesinados tras un supuesto plan urdido por otros menores de edad vinculados al crimen organizado, obligan a discutir posibles reformas a las normas penales.
En este sentido, el académico Rogelio Barba Álvarez, de la Universidad de Guadalajara, considera pertinente un cambio en la evaluación de la peligrosidad del menor en estos casos, y el diputado que preside la Comisión de Justicia, Héctor Pizano Ramos, sugiere discutir la posible reducción de la edad penal para adolescentes, “pero me hace falta conocer los puntos de vista de psicólogos, sociólogos, juristas y académicos para pronunciarme o presentar una iniciativa”.
En cambio, Felipe Garibay, también académico de la UdeG, advierte que las sentencias de cárcel o el aumento de las penas no solucionan el problema de adolescentes infractores, pues “el país está inmerso en un problema de carácter económico y cultural” en el que los menores se vuelven presa fácil para el crimen organizado.
Otros delitos de alto impacto registran también tendencia al alza. Los homicidios, en el mismo periodo, aumentaron 40%, al pasar de 37 a 52 casos, aunque de hecho tuvieron su punto más alto en 2011, con 53 asesinatos.
Los casos de portación de armas de fuego prohibidas fueron 18 sólo en 2012, mientras que en los cinco años anteriores se acumularon 10 casos. En contraste, los menores procesados por delitos contra la salud se redujeron en el mismo periodo: pasaron de 71 en 2007 a 33 en 2012.
La información de la Fiscalía registra delitos cometidos por menores de edad solamente para el primer trimestre de 2013: siete secuestros, nueve homicidios y una detención por tener armas para uso exclusivo del Ejército.
Los menores de edad inculpados son remitidos al Centro de Observación, Clasificación y Diagnóstico del Estado de Jalisco, conocido como Tutelar, pues, de acuerdo con la Ley de Justicia Integral para Adolescentes del Estado de Jalisco, las penas máximas que pueden obtener son hasta de siete años de internamiento, con miras a su reintegración social y familiar.
Sin embargo, casos como el de Luis Antonio Ortiz y Andrés Barba, los adolescentes que fueron asesinados tras un supuesto plan urdido por otros menores de edad vinculados al crimen organizado, obligan a discutir posibles reformas a las normas penales.
En este sentido, el académico Rogelio Barba Álvarez, de la Universidad de Guadalajara, considera pertinente un cambio en la evaluación de la peligrosidad del menor en estos casos, y el diputado que preside la Comisión de Justicia, Héctor Pizano Ramos, sugiere discutir la posible reducción de la edad penal para adolescentes, “pero me hace falta conocer los puntos de vista de psicólogos, sociólogos, juristas y académicos para pronunciarme o presentar una iniciativa”.
En cambio, Felipe Garibay, también académico de la UdeG, advierte que las sentencias de cárcel o el aumento de las penas no solucionan el problema de adolescentes infractores, pues “el país está inmerso en un problema de carácter económico y cultural” en el que los menores se vuelven presa fácil para el crimen organizado.