Jalisco
Queda sin arreglo político el endeudamiento para la Villa
La historia se repite: el proyecto será sometido a votación del pleno después que sólo los panistas lo aprobaron en comisiones
GUADALAJARA, JALISCO.- Sin
ninguna solución política a la vista y con el voto en contra de la regidora perredista Celia Fausto Lizaola –el priista Leobardo Alcalá Padilla se retiró en protesta porque la sesión inició con más de una hora de retraso–, la Comisión de Hacienda del Ayuntamiento de Guadalajara, volvió a aprobar el endeudamiento por mil millones de pesos para la construcción de la
Villa Panamericana.
El presidente del órgano edilicio, Salvador Sánchez Guerrero, explicó que el dictamen que será sometido a la votación del pleno en sesión el jueves entrante, es esencialmente el mismo que se retiró en la sesión pasada, ya que únicamente se harán modificaciones de forma al documento.
“Básicamente es el mismo dictamen”, anotó el regidor, “cambia un poquito la dinámica de quiénes integrarían la comisión para elegir la mejor opción financiera. Quedaría integrada toda la Comisión de Hacienda y todos los integrantes del Comité Técnico de la Villa Panamericana que son funcionarios municipales”.
En el nuevo dictamen se incluirán, además, los motivos por los que el Ayuntamiento debe solicitar el crédito y las aportaciones que realizaría cada parte involucrada en el proyecto.
Aunque en el documento, de nueva cuenta, no se integran mayores detalles sobre el empréstito, Sánchez Guerrero apeló a la “madurez” de los ediles tapatíos para que tomen la decisión más adecuada.
“El tema de la Villa Panamericana es un tema de la ciudad y seguramente cada uno de los regidores tendrá el criterio suficiente para saber si apoya ese tipo de proyectos o no. Yo creo que el tema fundamental de este dictamen, no son las formas con las que fue hecho o se vaya a resolver; el tema fundamental es si estamos de acuerdo en que el municipio se endeude para ser el financiador de la Villa Panamericana”.
Fausto Lizaola, en tanto, reiteró su rechazo y argumentó que “quienes tendrán que pagar el crédito serán los tapatíos”. No ofreció, sin embargo, ninguna alternativa de financiamiento porque “las propuestas las deben formular los que encabezan el proyecto”.
Durante la discusión fue convocado Fernando Guarda de Mateo, asesor financiero del Comité Técnico de la Villa Panamericana, quien explicó que si el endeudamiento se programa a 15 años, el Ayuntamiento tapatío estaría en posibilidades de recuperar la inversión en cuatro años.
Sostuvo que no hay riesgo de que el municipio no recupere los recursos, toda vez que la inversión se realizaría sobre activos que no se devalúan, que en este caso, serían viviendas y locales comerciales.
“El crédito se está transformando en activos que tienen el mismo valor del endeudamiento, entonces la posibilidad de perder ese dinero no existe, siempre y cuando el dinero se utilice para construir el complejo. Se está cambiando dinero por ladrillos”.
Explicó que los flujos de recuperación del dinero “comenzarían a partir de enero” de 2010, mes en el que también arrancarían las preventas del complejo inmobiliario.
Aunque no existe un compromiso formal, el Gobierno del Estado aportaría el año próximo alrededor de 500 millones de pesos –cantidad mínima que se requiere para arrancar el proyecto– para comprar 39 mil metros cuadrados de oficinas en la Villa Panamericana. A la lista también se suman dependencias como Pensiones del Estado y el propio Gobierno federal, que también está interesado en adquirir espacios en el desarrollo.
Guarda de Mateo aclaró que el socio desarrollador del municipio, Bosco Edificaciones, S.A. de C.V., únicamente invertirá el 8% del total del proyecto y a cambio obtendría un rendimiento de hasta el 12%, siempre cuando termine la construcción en tiempo y forma.
Abren la puerta a empresas locales
Las empresas tapatías interesadas en participar en la construcción de la Villa Panamericana podrán hacerlo siempre y cuando lleguen a un acuerdo con el socio desarrollador del municipio: Bosco Edificaciones, S.A. de C.V.
El vocero del proyecto, Víctor Martínez de Castro Green, explicó que este esquema permitiría al Ayuntamiento tapatío disminuir el crédito por mil millones de pesos y abrir la puerta para que empresas locales aporten capital al Proyecto Alameda.
“Yo creo que podemos configurar en esta idea de ‘bursatilizar’ la Villa Panamericana, abrir la opción a que otros participantes tengan participación o que alguien más se pueda sumar al consorcio que ya está formado (...), si tu quieres participar en la Villa Panamericana como socio desarrollador, te tienes que entender con Bosco, que es quien ganó (la licitación)”.
No obstante, el funcionario aclaró que en el corto plazo, la única fórmula para obtener los mil millones de pesos que requiere la construcción, es un endeudamiento que garantice los flujos necesarios para el complejo.
Consideró que el año próximo “habría otras opciones” para conseguir recursos, pero el riesgo sería que la Villa Panamericana no esté lista dentro de los plazos marcados por la Organización Deportiva Panamericana (ODEPA).
Aunque de entrada sólo se necesitan 500 millones para comenzar con la edificación, apuntó que el endeudamiento debe ser por mil millones de pesos para garantizar que la construcción no se detenga hasta su inauguración en agosto de 2011.
“El riesgo que no podemos correr es que consumamos los 500 millones de pesos y arrancado el año que entra, nos quedemos sin dinero. En la medida en que se detenga la Villa, la construcción cuesta más. El costo de detenerla y volverla a empezar, implica un alto costo para el proyecto en su conjunto”.
De Castro Green informó que el proyecto además requiere de otros 450 millones de pesos para renovar la infraestructura que existe en el Parque Morelos. Estos recursos se utilizarían para renovar las redes hidrosanitarias, sustituir el cableado subterráneo, mejorar las superficies de rodamiento y rehabilitar las fachadas de los inmuebles aledaños.
De esta cantidad, el municipio únicamente desembolsaría 220 millones de pesos y el resto lo aportarían Gobierno del Estado, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y el Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA).
Para saber
El dictamen para aprobar el crédito por mil millones para la construcción de la Villa Panamericana, fue retirado de la sesión de Ayuntamiento que se celebró el 6 de agosto. El documento se envió a la Comisión de Hacienda para su análisis y discusión.
Persiste conflicto por proyecto de deuda para Villa Panamericana
Si el pasado 6 de agosto en la sesión del pleno, los regidores del Ayuntamiento de Guadalajara abrieron un paréntesis para dar oportunidad a renegociar el proyecto de un endeudamiento por mil millones de pesos para la construcción de la Villa Panamericana que, según todos los pronósticos, sería rechazado y complicaría el cumplimiento de este compromiso para la realización de los Juegos Panamericanos de 2011, ayer las cosas volvieron al punto de partida.
Sesionó la Comisión edilicia de Hacienda que debía revisar y presentar opciones que resultaran aceptables para los regidores de oposición. De entrada, el edil priista Leobardo Alcalá Padilla se retiró, en reproche porque los trabajos comenzaron una hora después de lo acordado. Además, la regidora perredista Celia Fausto Lizaola votó en contra porque, dijo, “quienes deberán pagar el crédito son los tapatíos”.
En este escenario, se aprobó el proyecto sólo con los votos de los ediles panistas, aunque el documento, según reconoció Salvador Sánchez, “básicamente es el mismo”. Entonces, apeló a la madurez de todos los regidores para que se apruebe el crédito, pues “el tema fundamental es si estamos de acuerdo en que el municipio se endeude para ser el financiador de la Villa Panamericana”.
El documento será sometido a votación definitiva del pleno este jueves.
El presidente del órgano edilicio, Salvador Sánchez Guerrero, explicó que el dictamen que será sometido a la votación del pleno en sesión el jueves entrante, es esencialmente el mismo que se retiró en la sesión pasada, ya que únicamente se harán modificaciones de forma al documento.
“Básicamente es el mismo dictamen”, anotó el regidor, “cambia un poquito la dinámica de quiénes integrarían la comisión para elegir la mejor opción financiera. Quedaría integrada toda la Comisión de Hacienda y todos los integrantes del Comité Técnico de la Villa Panamericana que son funcionarios municipales”.
En el nuevo dictamen se incluirán, además, los motivos por los que el Ayuntamiento debe solicitar el crédito y las aportaciones que realizaría cada parte involucrada en el proyecto.
Aunque en el documento, de nueva cuenta, no se integran mayores detalles sobre el empréstito, Sánchez Guerrero apeló a la “madurez” de los ediles tapatíos para que tomen la decisión más adecuada.
“El tema de la Villa Panamericana es un tema de la ciudad y seguramente cada uno de los regidores tendrá el criterio suficiente para saber si apoya ese tipo de proyectos o no. Yo creo que el tema fundamental de este dictamen, no son las formas con las que fue hecho o se vaya a resolver; el tema fundamental es si estamos de acuerdo en que el municipio se endeude para ser el financiador de la Villa Panamericana”.
Fausto Lizaola, en tanto, reiteró su rechazo y argumentó que “quienes tendrán que pagar el crédito serán los tapatíos”. No ofreció, sin embargo, ninguna alternativa de financiamiento porque “las propuestas las deben formular los que encabezan el proyecto”.
Durante la discusión fue convocado Fernando Guarda de Mateo, asesor financiero del Comité Técnico de la Villa Panamericana, quien explicó que si el endeudamiento se programa a 15 años, el Ayuntamiento tapatío estaría en posibilidades de recuperar la inversión en cuatro años.
Sostuvo que no hay riesgo de que el municipio no recupere los recursos, toda vez que la inversión se realizaría sobre activos que no se devalúan, que en este caso, serían viviendas y locales comerciales.
“El crédito se está transformando en activos que tienen el mismo valor del endeudamiento, entonces la posibilidad de perder ese dinero no existe, siempre y cuando el dinero se utilice para construir el complejo. Se está cambiando dinero por ladrillos”.
Explicó que los flujos de recuperación del dinero “comenzarían a partir de enero” de 2010, mes en el que también arrancarían las preventas del complejo inmobiliario.
Aunque no existe un compromiso formal, el Gobierno del Estado aportaría el año próximo alrededor de 500 millones de pesos –cantidad mínima que se requiere para arrancar el proyecto– para comprar 39 mil metros cuadrados de oficinas en la Villa Panamericana. A la lista también se suman dependencias como Pensiones del Estado y el propio Gobierno federal, que también está interesado en adquirir espacios en el desarrollo.
Guarda de Mateo aclaró que el socio desarrollador del municipio, Bosco Edificaciones, S.A. de C.V., únicamente invertirá el 8% del total del proyecto y a cambio obtendría un rendimiento de hasta el 12%, siempre cuando termine la construcción en tiempo y forma.
Abren la puerta a empresas locales
Las empresas tapatías interesadas en participar en la construcción de la Villa Panamericana podrán hacerlo siempre y cuando lleguen a un acuerdo con el socio desarrollador del municipio: Bosco Edificaciones, S.A. de C.V.
El vocero del proyecto, Víctor Martínez de Castro Green, explicó que este esquema permitiría al Ayuntamiento tapatío disminuir el crédito por mil millones de pesos y abrir la puerta para que empresas locales aporten capital al Proyecto Alameda.
“Yo creo que podemos configurar en esta idea de ‘bursatilizar’ la Villa Panamericana, abrir la opción a que otros participantes tengan participación o que alguien más se pueda sumar al consorcio que ya está formado (...), si tu quieres participar en la Villa Panamericana como socio desarrollador, te tienes que entender con Bosco, que es quien ganó (la licitación)”.
No obstante, el funcionario aclaró que en el corto plazo, la única fórmula para obtener los mil millones de pesos que requiere la construcción, es un endeudamiento que garantice los flujos necesarios para el complejo.
Consideró que el año próximo “habría otras opciones” para conseguir recursos, pero el riesgo sería que la Villa Panamericana no esté lista dentro de los plazos marcados por la Organización Deportiva Panamericana (ODEPA).
Aunque de entrada sólo se necesitan 500 millones para comenzar con la edificación, apuntó que el endeudamiento debe ser por mil millones de pesos para garantizar que la construcción no se detenga hasta su inauguración en agosto de 2011.
“El riesgo que no podemos correr es que consumamos los 500 millones de pesos y arrancado el año que entra, nos quedemos sin dinero. En la medida en que se detenga la Villa, la construcción cuesta más. El costo de detenerla y volverla a empezar, implica un alto costo para el proyecto en su conjunto”.
De Castro Green informó que el proyecto además requiere de otros 450 millones de pesos para renovar la infraestructura que existe en el Parque Morelos. Estos recursos se utilizarían para renovar las redes hidrosanitarias, sustituir el cableado subterráneo, mejorar las superficies de rodamiento y rehabilitar las fachadas de los inmuebles aledaños.
De esta cantidad, el municipio únicamente desembolsaría 220 millones de pesos y el resto lo aportarían Gobierno del Estado, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y el Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA).
Para saber
El dictamen para aprobar el crédito por mil millones para la construcción de la Villa Panamericana, fue retirado de la sesión de Ayuntamiento que se celebró el 6 de agosto. El documento se envió a la Comisión de Hacienda para su análisis y discusión.
Persiste conflicto por proyecto de deuda para Villa Panamericana
Si el pasado 6 de agosto en la sesión del pleno, los regidores del Ayuntamiento de Guadalajara abrieron un paréntesis para dar oportunidad a renegociar el proyecto de un endeudamiento por mil millones de pesos para la construcción de la Villa Panamericana que, según todos los pronósticos, sería rechazado y complicaría el cumplimiento de este compromiso para la realización de los Juegos Panamericanos de 2011, ayer las cosas volvieron al punto de partida.
Sesionó la Comisión edilicia de Hacienda que debía revisar y presentar opciones que resultaran aceptables para los regidores de oposición. De entrada, el edil priista Leobardo Alcalá Padilla se retiró, en reproche porque los trabajos comenzaron una hora después de lo acordado. Además, la regidora perredista Celia Fausto Lizaola votó en contra porque, dijo, “quienes deberán pagar el crédito son los tapatíos”.
En este escenario, se aprobó el proyecto sólo con los votos de los ediles panistas, aunque el documento, según reconoció Salvador Sánchez, “básicamente es el mismo”. Entonces, apeló a la madurez de todos los regidores para que se apruebe el crédito, pues “el tema fundamental es si estamos de acuerdo en que el municipio se endeude para ser el financiador de la Villa Panamericana”.
El documento será sometido a votación definitiva del pleno este jueves.