Jalisco
La ''comida chatarra'' debe quedar fuera de escuelas: Hospital Civil
Frente al aumento de casos de diabetes tipo II en niños, lamentan que los diputados posterguen una legislación preventiva del problema
GUADALAJARA, JALISCO.- Los alimentos de bajo o nulo nivel nutricional, mejor conocidos como “comida chatarra”, deben quedar fuera de los planteles escolares, como una medida para frenar el incremento en el sobrepeso y la obesidad en los niños, aseguró el director general del Hospital Civil de Guadalajara, Jaime Agustín González Álvarez.
“Todos los alimentos de esta naturaleza, que generan obesidad, que ya se sabe, los pueden conseguir fuera, que los prohíban”, insistió el médico y directivo.
Aunque es conocido que los pequeños tienen acceso a este tipo de productos en cualquier lugar, incluida su casa, “es la escuela uno de los principales lugares donde los pueden adquirir, pues ahí pasan gran cantidad del día. Lamentablemente, en la escuela es donde está el problema principal, en las primarias los dejan comer lo que no deben”.
Aunado a la falta de políticas públicas para evitar la venta de estos productos, indica que otra de las problemáticas es que en los planteles no se cuenta con un buen programa de ejercicio que ayude a mitigar los efectos del sobrepeso, además de que no hay estrategias educativas para informar a los niños y que entiendan lo grave que es padecer sobrepeso.
González Álvarez señaló que una de las acciones necesarias es que las autoridades hagan comités colegiados interdisciplinarios, en los que intervengan todos los actores principales, como las secretarías de Educación y Salud en Jalisco, así como todo el sector salud incluidos el Hospital Civil de Guadalajara, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), entre otros, que son los que miden, a través de las atenciones que brindan, las consecuencias de la epidemia de obesidad y al mismo tiempo, tienen oportunidad de prevenirlas.
El funcionario manifestó que el panorama es grave en cuestión de incremento de enfermedades crónico-generativas como la diabetes e hipertensión, que en unos años rebasarán los servicios de salud de cualquier Estado, pues no habrá presupuesto que alcance para atender a todos los niños que están creciendo con problemas de obesidad y serán víctimas fáciles de este tipo de padecimientos.
Lamentó que las propuestas de reforma legal para eliminar la “comida chatarra” de las escuelas estén frenadas en el Congreso del Estado por motivos de otros intereses que no tienen relación con la salud.
“No hay ningún interés económico que esté por encima de la vida de los seres humanos, y mucho menos de los niños. Si ya tenemos la obesidad encima, y somos el país número uno a nivel mundial en obesidad infantil, hay que hacer algo pero ahora, no mañana”.
González Álvarez enfatizó que ya se han hecho propuestas como la que llevó por nombre “Guadalajara”, y que se presentó hace algunos años a nivel federal por parte del Hospital Civil. Consistía en modificar el Artículo Tercero de la Constitución, para que se incluyera de manera obligada la materia de nutrición en la infancia, en el programa de educación en todo el país. No progresó.
Atacar obesidad
-- Hasta el mes de noviembre de 2009, la Secretaría de Salud Jalisco (SSJ) tenía en tratamiento a 80 mil 990 niños de uno a nueve años de edad, por cuestiones de obesidad.
-- Antes era más común que los niños presentaran diabetes tipo I, debido a cuestiones de problemas con algunos órganos y herencia genética. Ahora la tendencia se inclina hacia el padecimiento de la diabetes tipo II, que puede ser retardada con el mejoramiento de costumbres.
-- La diabetes se encuentra entre las primeras tres causas de muerte en la Entidad, con una tasa de mortalidad de 64.66 por cada 100 mil habitantes, lo que equivale a cuatro mil 475 defunciones anualmente.
-- Cada año, un mexicano ingiere hasta 212 litros de refresco, situación que empareja a nuestro país con Estados Unidos, considerado hasta hace algunos años el máximo consumidor de gaseosas.
CRONOLOGÍA
Los legisladores jaliscienses intentaron, sin éxito, prohibir el consumo y la venta de “alimentos chatarra” en las escuelas.
* Agosto 2006
El Congreso local reforma la Ley de Educación para prohibir el “consumo” de alimentos chatarra.
* Septiembre 2006
El gobernador Francisco Ramírez Acuña veta la ley.
* Enero 2007
Los diputados sustituyen la prohibición del consumo por prohibición de publicidad y cambian “prohibir” por “evitar”. La ley se publica.
* Julio 2008
Se aprueba en primera lectura la prohibición de la venta de “alimentos chatarra”, pero no llega a segunda lectura. Se congela.
Por cierto...
La Ley de Educación del Estado de Jalisco señala en su Artículo 14 que las secretarías de Educación y Salud se coordinarán para “evitar la venta de alimentos con bajo o nulo valor nutricional en las tiendas escolares”.
“Todos los alimentos de esta naturaleza, que generan obesidad, que ya se sabe, los pueden conseguir fuera, que los prohíban”, insistió el médico y directivo.
Aunque es conocido que los pequeños tienen acceso a este tipo de productos en cualquier lugar, incluida su casa, “es la escuela uno de los principales lugares donde los pueden adquirir, pues ahí pasan gran cantidad del día. Lamentablemente, en la escuela es donde está el problema principal, en las primarias los dejan comer lo que no deben”.
Aunado a la falta de políticas públicas para evitar la venta de estos productos, indica que otra de las problemáticas es que en los planteles no se cuenta con un buen programa de ejercicio que ayude a mitigar los efectos del sobrepeso, además de que no hay estrategias educativas para informar a los niños y que entiendan lo grave que es padecer sobrepeso.
González Álvarez señaló que una de las acciones necesarias es que las autoridades hagan comités colegiados interdisciplinarios, en los que intervengan todos los actores principales, como las secretarías de Educación y Salud en Jalisco, así como todo el sector salud incluidos el Hospital Civil de Guadalajara, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), entre otros, que son los que miden, a través de las atenciones que brindan, las consecuencias de la epidemia de obesidad y al mismo tiempo, tienen oportunidad de prevenirlas.
El funcionario manifestó que el panorama es grave en cuestión de incremento de enfermedades crónico-generativas como la diabetes e hipertensión, que en unos años rebasarán los servicios de salud de cualquier Estado, pues no habrá presupuesto que alcance para atender a todos los niños que están creciendo con problemas de obesidad y serán víctimas fáciles de este tipo de padecimientos.
Lamentó que las propuestas de reforma legal para eliminar la “comida chatarra” de las escuelas estén frenadas en el Congreso del Estado por motivos de otros intereses que no tienen relación con la salud.
“No hay ningún interés económico que esté por encima de la vida de los seres humanos, y mucho menos de los niños. Si ya tenemos la obesidad encima, y somos el país número uno a nivel mundial en obesidad infantil, hay que hacer algo pero ahora, no mañana”.
González Álvarez enfatizó que ya se han hecho propuestas como la que llevó por nombre “Guadalajara”, y que se presentó hace algunos años a nivel federal por parte del Hospital Civil. Consistía en modificar el Artículo Tercero de la Constitución, para que se incluyera de manera obligada la materia de nutrición en la infancia, en el programa de educación en todo el país. No progresó.
Atacar obesidad
-- Hasta el mes de noviembre de 2009, la Secretaría de Salud Jalisco (SSJ) tenía en tratamiento a 80 mil 990 niños de uno a nueve años de edad, por cuestiones de obesidad.
-- Antes era más común que los niños presentaran diabetes tipo I, debido a cuestiones de problemas con algunos órganos y herencia genética. Ahora la tendencia se inclina hacia el padecimiento de la diabetes tipo II, que puede ser retardada con el mejoramiento de costumbres.
-- La diabetes se encuentra entre las primeras tres causas de muerte en la Entidad, con una tasa de mortalidad de 64.66 por cada 100 mil habitantes, lo que equivale a cuatro mil 475 defunciones anualmente.
-- Cada año, un mexicano ingiere hasta 212 litros de refresco, situación que empareja a nuestro país con Estados Unidos, considerado hasta hace algunos años el máximo consumidor de gaseosas.
CRONOLOGÍA
Los legisladores jaliscienses intentaron, sin éxito, prohibir el consumo y la venta de “alimentos chatarra” en las escuelas.
* Agosto 2006
El Congreso local reforma la Ley de Educación para prohibir el “consumo” de alimentos chatarra.
* Septiembre 2006
El gobernador Francisco Ramírez Acuña veta la ley.
* Enero 2007
Los diputados sustituyen la prohibición del consumo por prohibición de publicidad y cambian “prohibir” por “evitar”. La ley se publica.
* Julio 2008
Se aprueba en primera lectura la prohibición de la venta de “alimentos chatarra”, pero no llega a segunda lectura. Se congela.
Por cierto...
La Ley de Educación del Estado de Jalisco señala en su Artículo 14 que las secretarías de Educación y Salud se coordinarán para “evitar la venta de alimentos con bajo o nulo valor nutricional en las tiendas escolares”.