Jalisco
La CEDHJ, con más de 10 años sin reportes de jornaleros agrícolas
Visitador explica que la liberación de 275 jornaleros alerta para que se refuerce la vigilancia
GUADALAJARA, JALISCO (18/JUN/2013).- Hasta el hallazgo de los 275 jornaleros agrícolas en situación de esclavitud, la Comisión Estatal de los Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ) no había recibido reportes por este tipo de explotación desde 1998; la liberación de los trabajadores alerta para que se refuerce la vigilancia en este rubro, explica el tercer visitador general de la CEDHJ, Alfonso Hernández.
"Definitivamente se debe reforzar la labor preventiva a través de las instancias correspondientes, en este caso la Secretaría del Trabajo. También hago un llamado a no satanizar a los productores, a los empresarios, a las cooperativas, porque hay empresas que han hecho esfuerzos por generar condiciones de trabajo dignas".
El visitador adjudica la ausencia de denuncias a que los trabajadores aceptan estas condiciones por la necesidad del trabajo, y porque a partir del hecho registrado en 1998 la Comisión se ha dedicado a la labor preventiva. "De alguna forma se había frenado este tipo de actividades".
La CEDHJ se dedica a realizar talleres de capacitación, promoción de derechos y sensibilización a trabajadores y a empresarios; el visitador comenta que se dan visitas cada dos meses, aproximadamente.
En el caso de los jornaleros encontrados en Tolimán, la Fiscalía General del Estado invitó a la CEDHJ a constatar las condiciones en las que se encontraban los trabajadores. Se encontraron con incumplimiento a los derechos laborales: sin prestaciones, contratados por tres meses con sueldos de 110 pesos diarios y si no completaban 40 cajas de productos recolectados no les pagaban; así como condiciones insalubres en los albergues que vivían: sin muebles, sanitarios indecorosos. Es por eso que la CEDHJ realizará visitas más seguido a este tipo de albergues, comenta Alfonso Hernández.
Falta de vigilancia propicia explotación laboral
La Ley es muy clara en cuestiones laborales, y más que vacíos legales que propicien anomalías hacia trabajadores, lo que falta es vigilancia de las autoridades, comenta Alfonso Martínez Suárez, representante en Jalisco de la Academia Mexicana de Derecho Procesal del Trabajo.
Además, estas situaciones de falta de respeto a los derechos laborales también se dan porque los afectados no reportan esas anomalías y tienen aceptación a la precariedad debido a la necesidad por el trabajo.
A decir del especialista en Derecho Laboral, La Ley Federal del Trabajo contempla todas las medidas y las sanciones necesarias para que no se den casos de este tipo, de hecho, con las últimas reformas se elevaron las sanciones por incumplimiento y pueden llegar a los cinco mil salarios mínimos por irregularidad.
El conflicto viene en la aplicación, dado que no se lleva como debe ser y las autoridades son omisas para vigilar que se sigan las normas de trabajo en todos los centros laborales, y estar alerta también de aquellas compañías que no registran a sus trabajadores que laboran "a puerta cerrada", con condiciones paupérrimas y que son más propensas a no respetar los derechos laborales.
Las anomalías más recurrentes en la situación laboral de los jornaleros agrícolas son en el incumplimiento a su inscripción al seguro, así como la falta de pago de otros derechos como el sistema de ahorro de retiro, pues con esta omisión el patrón se ahorra gastos, refiere el experto.
Las personas afectadas por cuestiones laborales pueden iniciar un proceso de queja en la Secretaría del Trabajo; o en caso de no estar dados de alta en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), pueden acudir a éste para que se obligue al patrón a registrar al trabajador.
EL INFORMADOR / ALEJANDRA PEDROZA
"Definitivamente se debe reforzar la labor preventiva a través de las instancias correspondientes, en este caso la Secretaría del Trabajo. También hago un llamado a no satanizar a los productores, a los empresarios, a las cooperativas, porque hay empresas que han hecho esfuerzos por generar condiciones de trabajo dignas".
El visitador adjudica la ausencia de denuncias a que los trabajadores aceptan estas condiciones por la necesidad del trabajo, y porque a partir del hecho registrado en 1998 la Comisión se ha dedicado a la labor preventiva. "De alguna forma se había frenado este tipo de actividades".
La CEDHJ se dedica a realizar talleres de capacitación, promoción de derechos y sensibilización a trabajadores y a empresarios; el visitador comenta que se dan visitas cada dos meses, aproximadamente.
En el caso de los jornaleros encontrados en Tolimán, la Fiscalía General del Estado invitó a la CEDHJ a constatar las condiciones en las que se encontraban los trabajadores. Se encontraron con incumplimiento a los derechos laborales: sin prestaciones, contratados por tres meses con sueldos de 110 pesos diarios y si no completaban 40 cajas de productos recolectados no les pagaban; así como condiciones insalubres en los albergues que vivían: sin muebles, sanitarios indecorosos. Es por eso que la CEDHJ realizará visitas más seguido a este tipo de albergues, comenta Alfonso Hernández.
Falta de vigilancia propicia explotación laboral
La Ley es muy clara en cuestiones laborales, y más que vacíos legales que propicien anomalías hacia trabajadores, lo que falta es vigilancia de las autoridades, comenta Alfonso Martínez Suárez, representante en Jalisco de la Academia Mexicana de Derecho Procesal del Trabajo.
Además, estas situaciones de falta de respeto a los derechos laborales también se dan porque los afectados no reportan esas anomalías y tienen aceptación a la precariedad debido a la necesidad por el trabajo.
A decir del especialista en Derecho Laboral, La Ley Federal del Trabajo contempla todas las medidas y las sanciones necesarias para que no se den casos de este tipo, de hecho, con las últimas reformas se elevaron las sanciones por incumplimiento y pueden llegar a los cinco mil salarios mínimos por irregularidad.
El conflicto viene en la aplicación, dado que no se lleva como debe ser y las autoridades son omisas para vigilar que se sigan las normas de trabajo en todos los centros laborales, y estar alerta también de aquellas compañías que no registran a sus trabajadores que laboran "a puerta cerrada", con condiciones paupérrimas y que son más propensas a no respetar los derechos laborales.
Las anomalías más recurrentes en la situación laboral de los jornaleros agrícolas son en el incumplimiento a su inscripción al seguro, así como la falta de pago de otros derechos como el sistema de ahorro de retiro, pues con esta omisión el patrón se ahorra gastos, refiere el experto.
Las personas afectadas por cuestiones laborales pueden iniciar un proceso de queja en la Secretaría del Trabajo; o en caso de no estar dados de alta en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), pueden acudir a éste para que se obligue al patrón a registrar al trabajador.
EL INFORMADOR / ALEJANDRA PEDROZA