Jalisco
Incendios, síntoma de la problemática en La Primavera
El patronato del área verde no cuenta con poderes ni recursos que conformen un frente preventivo o reactivo contra las eventualidades
GUADALAJARA, JALISCO (30/ABR/2013).- El incendio es el síntoma. La enfermedad es un modelo de desarrollo urbano que colisiona permanentemente con la viabilidad de las áreas naturales. Y el diagnóstico es inequívoco: la recurrencia cada vez mayor de los siniestros provocados por el hombre en La Primavera, tanto intencionales como accidentales, hace urgente replantearse la manera en que convivimos los tapatíos con el bosque y articular cambios de fondo al respecto.
El Bosque La Primavera enfrenta numerosos problemas. La definición de roles en su gestión, protección y restauración es una maraña con actores federales, estatales, municipales y privados envueltos. Su patronato no cuenta con poderes ni recursos suficientes para enfrentar a cabalidad sus labores. El anterior Gobierno estatal abandonó el área a su suerte por años. La presión urbana no deja de aumentar. No hay suficiente claridad en sus límites (ni siquiera una señalización apropiada) y esto, sumado a la impunidad que prevalece para castigar delitos ambientales y territoriales, propicia las invasiones de fraccionadores y asentamientos irregulares. Finalmente, no existe aún un programa de manejo integral que evite que se acumule material combustible y que los incendios se salgan de control.
La Primavera es un área natural protegida, aunque eso no significa que sea una zona estrictamente pública. Buena parte de sus terrenos son privados. Pero es, a la vez, un espacio que la ciudadanía ve como propio. El bosque, para miles de tapatíos, es su parque urbano, un punto de recreación. Hay en él comidas campestres, paseos en bicicleta y a caballo, excursiones, ejercicios al aire libre, etcétera. Forma parte de la identidad de la ciudad. Sin embargo, la infraestructura para tales fines no es la adecuada en muchos casos ni tampoco existe personal capacitado suficiente para atender el área con esa lógica. Por otro lado, en el terreno de los ciudadanos hace falta una mayor cultura ambiental. La mezcla de ciudadanos inconscientes y autoridades omisas ha resultado muy nociva para el entorno ambiental de la ciudad.
El ideal para un bosque como La Primavera, con la ciudad justo al lado, es que sea un espacio bien manejado, con una superficie apropiadamente delimitada y una vocación forestal garantizada por ley, con áreas de actividad humana reglamentada y segura. Para ello es necesario que las autoridades, en sus distintos niveles, tomen acuerdos y acciones que lleven a término las buenas intenciones que enuncian luego de cada incendio forestal.
La heroicidad de los brigadistas comunitarios, municipales, estatales y federales que combaten incendios como el del fin de semana debe ser respaldada por acciones concretas que vayan a la raíz de los problemas.
CLAVES
Diez problemas de la reserva
1. Confusión y omisión en los ámbitos de responsabilidad local, federal y privada.
2. Insuficiente delimitación y señalización.
3. Impunidad legal que permite invasiones.
4. Falta de presupuesto directo.
5. Falta de poderes para su patronato.
6. Falta de personal capacitado suficiente.
7. Bajos salarios y escasez de equipo de los brigadistas forestales comunitarios, municipales y estatales.
8. Falta de conciencia ambiental de los visitantes.
9. Falta de un programa de manejo de combustiblesacumulados.
10. Es necesario que la vocación forestal de todo el perímetro del bosque quede garantizada por ley.
> MENSAJES SE PROPAGAN
Combate en redes
El fuego en La Primavera comenzó a propagarse la tarde del domingo y al mismo ritmo, los mensajes en redes sociales. En #BosqueLaPrimavera y #BosquePrimavera, autoridades y ciudadanía comparten el desarrollo de la jornada. Ciudadanos que viven cerca del área del incidente, muy pegada a las zonas de Pinar de la Venta y San Esteban, han utilizado Twitter y Facebook para dar aviso de lo que sucede. Autoridades esporádicamente informan cómo va el combate, cuántas personas participan, las causas y recomendaciones a los ciudadanos.
Plan de blindaje para el bosque, sin dimensiones y sin prisa
La videovigilancia en el Bosque La Primavera actualmente se remite sólo a dos cámaras y en ellas recae el monitoreo de 30 mil 500 hectáreas.
El incendio que consumió más de ocho mil hectáreas del bosque en abril de 2012 encendió un foco de atención en el ex presidente, Felipe Calderón Hinojosa, quien impulsó el “Plan Estratégico del Manejo de Fuego”, para cuya cristalización destinarían 92 millones 733 mil 800 pesos.
La estrategia contempló la construcción de un centro nacional de capacitación y adiestramiento para bomberos forestales, un centro de monitoreo mediante cámaras y la compra de equipo especializado para atacar los incendios.
La Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente (Proepa) aseguró que había un “sistema estatal de videovigilancia”; pero posteriormente, el titular de la instancia, Fernando Montes de Oca, confirmó que eran sólo dos cámaras y agregó que se habían gastado un millón 600 mil pesos (1.7% del total proyectado en el “Plan Estratégico del Manejo de Fuego”) en su compra.
En su momento, Calderón Hinojosa calificó la deflagración como una “tragedia ambiental”, por lo que instruyó a la PGR (Procuraduría General de la República) a dar con los responsables. A un año de distancia poco se sabe del avance en estas investigaciones.
Las campañas políticas que arrancaron el último día de marzo de 2012, y las más de ocho mil hectáreas consumidas en el Bosque La Primavera en el incendio que inició el 21 de abril, sirvieron como marco para que los entonces aspirantes al Gobierno del Estado prometieran expropiar ese espacio natural, como una medida de solución.
Al menos así ocurrió con los abanderados del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Movimiento Ciudadano y el Partido de la Revolución Democrática (PRD), Aristóteles Sandoval, Enrique Alfaro y Fernando Garza, respectivamente. Fernando Guzmán, el candidato panista (y también ex secretario de Gobierno), dijo que eso no garantizaría el cese de incendios.
Tras ganar las elecciones y previo a tomar protesta, Sandoval Díaz habló de arrancar los procedimientos de expropiación a los predios particulares, que son más de 80% del total, y decretar a La Primavera como Área Natural Protegida.
En marzo pasado, el director del Fideicomiso que administra el bosque, José Luis Gámez Valdivia, confirmó que se había iniciado un censo con propietarios de terrenos (previo a que el Gobierno estatal presentara la iniciativa para expropiarlos), y que al menos ocho han mostrado interés en la venta.
MEDIDAS PREVENTIVAS
Enfermos de asma o alergiasno deben exponerse
> Pacientes con enfermedades alérgicas o pulmonares, como el asma, son los más sensibles y propensos a sufrir algún daño a la salud tras contingencias ambientales, como la ocasionada por el incendio en La Primavera, por lo que son quienes deben tener más cuidado y no exponerse.
> La Coordinación de Urgencias Epidemiológicas y Desastres de la Secretaría de Salud Jalisco (SSJ) recomendó a la ciudadanía mantener cuidados preventivos en esta temporada de estiaje, sobre todo en el hogar, trabajo y escuela. Recomendó a la población no realizar actividades físicas o deportivas al aire libre. Evitar fumar, tomar abundantes líquidos, consumir alimentos ricos en vitamina C”.
> Aunque parezcan pequeños signos, advirtió, es importante que si se comienza con irritación nasal, en ojos o piel, lagrimeo, escurrimiento nasal o ardor en la garganta, es necesario que se acuda con el médico para que sea él quien atienda los síntomas y dé un diagnóstico y tratamiento.
LA VOZ DEL EXPERTO
Habrá quemas, incluso con expropiación
( Miguel Magaña, investigador)
La expropiación del Bosque La Primavera no es la clave para prevenir incendios, sino un ordenamiento ecológico para establecer estrategias, lineamientos, programas, compromisos, y un plan de manejo a largo plazo, según el investigador del Departamento de Ciencias Ambientales de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Miguel Enrique Magaña Virgen.
En este plan, explicó el investigador, deben coordinarse los propietarios de alguna parte del bosque, la sociedad, el Gobierno estatal y los municipales “pero de manera inmediata y efectiva, no cada vez que hay incendios. La administración ahora es vertical y dictatorial. Los empleados están en condiciones ridículas, sin el apoyo ni la gestión interna suficiente”.
Magaña Virgen agregó que el problema del bosque es multifacético, debido a que el “ahogamiento urbano” provocado por la invasión a los terrenos de La Primavera provoca incidentes: “La vigilancia debe incluir a todos, hasta a los propietarios que levantan la mano cuando algo va en contra de sus intereses, pero también tienen la obligatoriedad de invertir en ello”.
Describe que, de acuerdo con la ley forestal, un predio que ha sido incendiado no puede modificar su uso de suelo en 20 años; pero, aclaró, una cosa dice la ley y otra los intereses y la corrupción.
Respecto a las acciones gubernamentales, el maestro dijo que el bosque ya necesita acción y no discursos: “Si los generalizo sería muy injusto pero se contesta claramente con el estado del bosque: procesos erosivos, 25% de área perdida, procesos de deforestación y desertificación, y la repetición de incendios causada por la mala conducta de la gente”.
Indicó que la vigilancia no puede corresponder sólo a la autoridad, tiene que incluir a todos los que viven dentro y alrededor de la zona. “¿Qué tal si a nosotros se nos incendia algo y lo pagan los demás?”.
Apoyo a brigadistas
Sobre las condiciones en las que trabaja el personal encargado de combatir los incendios, el investigador de la UdeG planteó un mejor escenario para actuar. “Los que andan con la pala, que verdaderamente se la están ‘rifando’, es a donde menos llegan los apoyos”, sentenció Miguel Enrique Magaña Virgen.
FRASE
''El objetivo no es prepararse para combatir el fuego, es prepararse para que no haya fuego''.
Miguel Enrique Magaña Virgen, investigador de la UdeG.
El Bosque La Primavera enfrenta numerosos problemas. La definición de roles en su gestión, protección y restauración es una maraña con actores federales, estatales, municipales y privados envueltos. Su patronato no cuenta con poderes ni recursos suficientes para enfrentar a cabalidad sus labores. El anterior Gobierno estatal abandonó el área a su suerte por años. La presión urbana no deja de aumentar. No hay suficiente claridad en sus límites (ni siquiera una señalización apropiada) y esto, sumado a la impunidad que prevalece para castigar delitos ambientales y territoriales, propicia las invasiones de fraccionadores y asentamientos irregulares. Finalmente, no existe aún un programa de manejo integral que evite que se acumule material combustible y que los incendios se salgan de control.
La Primavera es un área natural protegida, aunque eso no significa que sea una zona estrictamente pública. Buena parte de sus terrenos son privados. Pero es, a la vez, un espacio que la ciudadanía ve como propio. El bosque, para miles de tapatíos, es su parque urbano, un punto de recreación. Hay en él comidas campestres, paseos en bicicleta y a caballo, excursiones, ejercicios al aire libre, etcétera. Forma parte de la identidad de la ciudad. Sin embargo, la infraestructura para tales fines no es la adecuada en muchos casos ni tampoco existe personal capacitado suficiente para atender el área con esa lógica. Por otro lado, en el terreno de los ciudadanos hace falta una mayor cultura ambiental. La mezcla de ciudadanos inconscientes y autoridades omisas ha resultado muy nociva para el entorno ambiental de la ciudad.
El ideal para un bosque como La Primavera, con la ciudad justo al lado, es que sea un espacio bien manejado, con una superficie apropiadamente delimitada y una vocación forestal garantizada por ley, con áreas de actividad humana reglamentada y segura. Para ello es necesario que las autoridades, en sus distintos niveles, tomen acuerdos y acciones que lleven a término las buenas intenciones que enuncian luego de cada incendio forestal.
La heroicidad de los brigadistas comunitarios, municipales, estatales y federales que combaten incendios como el del fin de semana debe ser respaldada por acciones concretas que vayan a la raíz de los problemas.
CLAVES
Diez problemas de la reserva
1. Confusión y omisión en los ámbitos de responsabilidad local, federal y privada.
2. Insuficiente delimitación y señalización.
3. Impunidad legal que permite invasiones.
4. Falta de presupuesto directo.
5. Falta de poderes para su patronato.
6. Falta de personal capacitado suficiente.
7. Bajos salarios y escasez de equipo de los brigadistas forestales comunitarios, municipales y estatales.
8. Falta de conciencia ambiental de los visitantes.
9. Falta de un programa de manejo de combustiblesacumulados.
10. Es necesario que la vocación forestal de todo el perímetro del bosque quede garantizada por ley.
> MENSAJES SE PROPAGAN
Combate en redes
El fuego en La Primavera comenzó a propagarse la tarde del domingo y al mismo ritmo, los mensajes en redes sociales. En #BosqueLaPrimavera y #BosquePrimavera, autoridades y ciudadanía comparten el desarrollo de la jornada. Ciudadanos que viven cerca del área del incidente, muy pegada a las zonas de Pinar de la Venta y San Esteban, han utilizado Twitter y Facebook para dar aviso de lo que sucede. Autoridades esporádicamente informan cómo va el combate, cuántas personas participan, las causas y recomendaciones a los ciudadanos.
Plan de blindaje para el bosque, sin dimensiones y sin prisa
La videovigilancia en el Bosque La Primavera actualmente se remite sólo a dos cámaras y en ellas recae el monitoreo de 30 mil 500 hectáreas.
El incendio que consumió más de ocho mil hectáreas del bosque en abril de 2012 encendió un foco de atención en el ex presidente, Felipe Calderón Hinojosa, quien impulsó el “Plan Estratégico del Manejo de Fuego”, para cuya cristalización destinarían 92 millones 733 mil 800 pesos.
La estrategia contempló la construcción de un centro nacional de capacitación y adiestramiento para bomberos forestales, un centro de monitoreo mediante cámaras y la compra de equipo especializado para atacar los incendios.
La Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente (Proepa) aseguró que había un “sistema estatal de videovigilancia”; pero posteriormente, el titular de la instancia, Fernando Montes de Oca, confirmó que eran sólo dos cámaras y agregó que se habían gastado un millón 600 mil pesos (1.7% del total proyectado en el “Plan Estratégico del Manejo de Fuego”) en su compra.
En su momento, Calderón Hinojosa calificó la deflagración como una “tragedia ambiental”, por lo que instruyó a la PGR (Procuraduría General de la República) a dar con los responsables. A un año de distancia poco se sabe del avance en estas investigaciones.
Las campañas políticas que arrancaron el último día de marzo de 2012, y las más de ocho mil hectáreas consumidas en el Bosque La Primavera en el incendio que inició el 21 de abril, sirvieron como marco para que los entonces aspirantes al Gobierno del Estado prometieran expropiar ese espacio natural, como una medida de solución.
Al menos así ocurrió con los abanderados del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Movimiento Ciudadano y el Partido de la Revolución Democrática (PRD), Aristóteles Sandoval, Enrique Alfaro y Fernando Garza, respectivamente. Fernando Guzmán, el candidato panista (y también ex secretario de Gobierno), dijo que eso no garantizaría el cese de incendios.
Tras ganar las elecciones y previo a tomar protesta, Sandoval Díaz habló de arrancar los procedimientos de expropiación a los predios particulares, que son más de 80% del total, y decretar a La Primavera como Área Natural Protegida.
En marzo pasado, el director del Fideicomiso que administra el bosque, José Luis Gámez Valdivia, confirmó que se había iniciado un censo con propietarios de terrenos (previo a que el Gobierno estatal presentara la iniciativa para expropiarlos), y que al menos ocho han mostrado interés en la venta.
MEDIDAS PREVENTIVAS
Enfermos de asma o alergiasno deben exponerse
> Pacientes con enfermedades alérgicas o pulmonares, como el asma, son los más sensibles y propensos a sufrir algún daño a la salud tras contingencias ambientales, como la ocasionada por el incendio en La Primavera, por lo que son quienes deben tener más cuidado y no exponerse.
> La Coordinación de Urgencias Epidemiológicas y Desastres de la Secretaría de Salud Jalisco (SSJ) recomendó a la ciudadanía mantener cuidados preventivos en esta temporada de estiaje, sobre todo en el hogar, trabajo y escuela. Recomendó a la población no realizar actividades físicas o deportivas al aire libre. Evitar fumar, tomar abundantes líquidos, consumir alimentos ricos en vitamina C”.
> Aunque parezcan pequeños signos, advirtió, es importante que si se comienza con irritación nasal, en ojos o piel, lagrimeo, escurrimiento nasal o ardor en la garganta, es necesario que se acuda con el médico para que sea él quien atienda los síntomas y dé un diagnóstico y tratamiento.
LA VOZ DEL EXPERTO
Habrá quemas, incluso con expropiación
( Miguel Magaña, investigador)
La expropiación del Bosque La Primavera no es la clave para prevenir incendios, sino un ordenamiento ecológico para establecer estrategias, lineamientos, programas, compromisos, y un plan de manejo a largo plazo, según el investigador del Departamento de Ciencias Ambientales de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Miguel Enrique Magaña Virgen.
En este plan, explicó el investigador, deben coordinarse los propietarios de alguna parte del bosque, la sociedad, el Gobierno estatal y los municipales “pero de manera inmediata y efectiva, no cada vez que hay incendios. La administración ahora es vertical y dictatorial. Los empleados están en condiciones ridículas, sin el apoyo ni la gestión interna suficiente”.
Magaña Virgen agregó que el problema del bosque es multifacético, debido a que el “ahogamiento urbano” provocado por la invasión a los terrenos de La Primavera provoca incidentes: “La vigilancia debe incluir a todos, hasta a los propietarios que levantan la mano cuando algo va en contra de sus intereses, pero también tienen la obligatoriedad de invertir en ello”.
Describe que, de acuerdo con la ley forestal, un predio que ha sido incendiado no puede modificar su uso de suelo en 20 años; pero, aclaró, una cosa dice la ley y otra los intereses y la corrupción.
Respecto a las acciones gubernamentales, el maestro dijo que el bosque ya necesita acción y no discursos: “Si los generalizo sería muy injusto pero se contesta claramente con el estado del bosque: procesos erosivos, 25% de área perdida, procesos de deforestación y desertificación, y la repetición de incendios causada por la mala conducta de la gente”.
Indicó que la vigilancia no puede corresponder sólo a la autoridad, tiene que incluir a todos los que viven dentro y alrededor de la zona. “¿Qué tal si a nosotros se nos incendia algo y lo pagan los demás?”.
Apoyo a brigadistas
Sobre las condiciones en las que trabaja el personal encargado de combatir los incendios, el investigador de la UdeG planteó un mejor escenario para actuar. “Los que andan con la pala, que verdaderamente se la están ‘rifando’, es a donde menos llegan los apoyos”, sentenció Miguel Enrique Magaña Virgen.
FRASE
''El objetivo no es prepararse para combatir el fuego, es prepararse para que no haya fuego''.
Miguel Enrique Magaña Virgen, investigador de la UdeG.