Internacional

Un millón pide la dimisión de Berlusconi

Los inconformes se manifestaron en más de 230 ciudades italianas

ROMA, ITALIA (14/FEB/2011).- Más de un millón de personas, según los organizadores, participaron en toda Italia y algunas partes del mundo en protestas contra el primer ministro, Silvio Berlusconi, acusado de abuso de poder y prostitución de menor de edad.  

Convocadas por organizaciones de mujeres bajo el lema “Si no es ahora, ¿cuándo?”, las manifestaciones se celebraron en más de 230 ciudades de Italia y en ciudades como Tokio, Nueva York, Ginebra y Madrid.  

“Somos más de un millón de personas en el mundo, nos hemos apenas contado”, dijo la actriz Angela Finocchiaro desde el palco de la Plaza del Pueblo de Roma, donde confluyeron por la tarde las marchas celebradas en la capital italiana.

Los objetivos de la protesta eran los de pedir “dignidad, respeto, libertad y derechos para las mujeres”, aunque al final la consigna principal fue la de exigir la dimisión de Berlusconi.
Finocchiaro leyó un mensaje en el que la actriz Monica Vitti (desde hace años alejada de los escenarios por graves problemas de salud), se solidarizó con la protesta y dijo: “Las mujeres siempre me han sorprendido”.

Según los organizadores, en Roma participaron 500 mil personas y en Milán 100 mil personas, lo mismo que en Nápoles, mientras varios miles más protestaron en Turín, Génova, Palermo, Pescara, Cagliari, Venecia, Florencia, Catania, Pesaro, Bari, Trieste o en ciudades más pequeñas.  

El primer ministro es acusado de prostitución de menor por su presunta relación con la marroquí Karima El Mahroug, conocida como “Ruby”, cuando ella aún no cumplía la mayoría de edad.

“Dignidad, te defenderé”; “Este Gobierno nos ofende, alcemos la cabeza”; “Quiero una política sin sexo”; “Al sexo bello lo ensucia un jefe feo” y “Gran jefe, dimite”, fueron algunas de las consignas gritadas por mujeres y hombres de todas las edades.

En la capital de Lombardía, la parlamentaria del Partido Demócrata (PD), Barbara Pollastrini, aseguró que Berlusconi ha quitado el honor al país. “Todos nosotros estamos pagando el precio, pero las mujeres pagan un precio doble”.

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