Internacional
Representantes de la comunidad internacional buscan la reconstrucción de Malí
El objetivo de la reunión en Bruselas es encontrar una solución duradera y a largo plazo para el país africano, una vez que finalice la intervención francesa
BRUSELAS, BÉLGICA (05/FEB/2013).- Malí pidió este martes ayuda para "combatir a los islamistas", antes de una reunión en Bruselas entre la ONU, la Unión Africana (UA) y representantes de la comunidad internacional con el objetivo de alcanzar una solución pacífica a largo plazo en el país africano.
"Todo el mundo está aquí. Esta amenaza involucra a los países civilizados", señaló el ministro de Exteriores de Malí, Tieman Coulibaly.
"El mundo entero debe respaldarnos para combatir a los yihadistas en nuestro territorio", añadió.
El objetivo de la reunión en Bruselas es encontrar una solución duradera y a largo plazo para el país, una vez que finalice la intervención francesa en el país africano.
"Necesitamos prepararnos para el futuro", dijo un funcionario europeo, un día antes de la reunión.
"Cuando un Estado se cae necesitamos reconstruirlo, como si fuera Humpty Dumpty", añadió la fuente, que solicitó el anonimato.
El ejército francés continuó el lunes la ofensiva persiguiendo a los grupos armados islamistas en el norte de Malí, donde se cree mantienen en su poder a siete rehenes franceses.
En París, el vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el mandatario de Francia, François Hollande, concordaron en la necesidad de establecer lo antes posible una fuerza africana en Malí, para luego ponerla bajo la dirección de la ONU.
"Estados Unidos y Francia concuerdan en la necesidad de instituir tan rápido como sea (...) posible la misión internacional encabezada por africanos en Malí y traspasarla tan rápido como la cautela lo permita a las Naciones Unidas", afirmó Biden, tras entrevistarse en París con Hollande.
Los islamistas, obligados a abandonar las ciudades norteñas de Gao, Tombuctú y Kidal, se refugiaron en el macizo de Ifoghas, situado a 1.500 km al noreste de Bamako, cerca de la frontera con Argelia.
En el macizo de Ifoghas, en sus montañas y grutas, cuna de los tuareg, se esconden una gran parte de los jefes y combatientes islamistas y se encuentran los depósitos de armas y carburante, según expertos y fuentes de seguridad de la región.
En esa zona también se encontrarían los rehenes franceses secuestrados en Níger y Malí en 2011 y 2012 por los grupos Al Qaida en el Magreb Islámico (AQMI) y Movimiento para la Unicidad y el Yihad en África del Oeste (MUYAO).
"Todo el mundo está aquí. Esta amenaza involucra a los países civilizados", señaló el ministro de Exteriores de Malí, Tieman Coulibaly.
"El mundo entero debe respaldarnos para combatir a los yihadistas en nuestro territorio", añadió.
El objetivo de la reunión en Bruselas es encontrar una solución duradera y a largo plazo para el país, una vez que finalice la intervención francesa en el país africano.
"Necesitamos prepararnos para el futuro", dijo un funcionario europeo, un día antes de la reunión.
"Cuando un Estado se cae necesitamos reconstruirlo, como si fuera Humpty Dumpty", añadió la fuente, que solicitó el anonimato.
El ejército francés continuó el lunes la ofensiva persiguiendo a los grupos armados islamistas en el norte de Malí, donde se cree mantienen en su poder a siete rehenes franceses.
En París, el vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el mandatario de Francia, François Hollande, concordaron en la necesidad de establecer lo antes posible una fuerza africana en Malí, para luego ponerla bajo la dirección de la ONU.
"Estados Unidos y Francia concuerdan en la necesidad de instituir tan rápido como sea (...) posible la misión internacional encabezada por africanos en Malí y traspasarla tan rápido como la cautela lo permita a las Naciones Unidas", afirmó Biden, tras entrevistarse en París con Hollande.
Los islamistas, obligados a abandonar las ciudades norteñas de Gao, Tombuctú y Kidal, se refugiaron en el macizo de Ifoghas, situado a 1.500 km al noreste de Bamako, cerca de la frontera con Argelia.
En el macizo de Ifoghas, en sus montañas y grutas, cuna de los tuareg, se esconden una gran parte de los jefes y combatientes islamistas y se encuentran los depósitos de armas y carburante, según expertos y fuentes de seguridad de la región.
En esa zona también se encontrarían los rehenes franceses secuestrados en Níger y Malí en 2011 y 2012 por los grupos Al Qaida en el Magreb Islámico (AQMI) y Movimiento para la Unicidad y el Yihad en África del Oeste (MUYAO).