Entretenimiento
La vida después de Lucía
La cinta de Michel Franco hace su arribo a las salas mexicanas luego de recorrer los principales festivales internacionales
GUADALAJARA, JALISCO (17/OCT/2012).- ¿Qué se debe hacer cuando la humillación rompe los límites de la tolerancia? ¿Cómo defenderse del acoso verbal, físico y psicológico? Estas preguntas rondaron en la mente del realizador Michel Franco para concebir Después de Lucía, una historia donde la falta de comunicación y la soledad se convirtieron en una bola de nieve que termina fracturando a una familia.
Es la trama con carácter universal la que le ha abierto las puertas del mundo a Michel Franco, quien en mayo pasado presentara su segunda producción en Cannes y regresó a casa con el premio Una Cierta Mirada en las manos, no sin antes haber conquistado a la crítica y la prensa extranjera. Y la cosecha de reconocimientos suma, entre otros, el representar a México en la carrera por el Oscar y el premio Goya el próximo año.
La película, que finalmente llega a las salas mexicanas este 19 de octubre, narra la relación entre Roberto (Hernán Mendoza) y su hija Alejandra, de 17 años (Tessa Ía González Norvind), quienes ahora deben enfrentar la vida como viudo y huérfana, respectivamente. Encarar el proceso de duelo los obliga a abandonar su residencia en Puerto Vallarta para radicar en la capital del país, y es en este vórtice de emociones donde se siembra la semilla de la incomunicación y comienza el deterioro emocional de la adolescente al enfrentarse al bullying de sus compañeros en la nueva escuela.
Una mirada dentro
El director Michel Franco señaló que el tema de la violencia escolar no era lo prioritario al momento de filmar Después de Lucía, sino que tomó fuerza conforme el desarrollo del rodaje. “A veces no queremos aceptar la realidad y supongo que para los padres de familia es difícil percibir este tipo de circunstancias, tengo el dato de que cuatro de cada 10 niños sufre de acoso escolar; no sólo eso es lo que se aborda en la película, también los adolescentes, en la cinta, consumen drogas, alcohol y tienen relaciones sexuales, y muchas veces no nos queremos dar cuenta de la realidad”.
El filme ha logrado conmover a cada audiencia que la ha recibido en los festivales internacionales, por la crudeza con la que los jóvenes son capaces de dirigirse en la vida y las consecuencias que alcanzan. “Lo que más me interesa de la película es el luto personal, la presión y falta de comunicación de los personajes, el acoso llegó después y de manera natural, por lo que se fue comiendo un poco a la película, eso es lo que ha llamado más la atención”.
Fue difícil darle vida a Alejandra: Tessa Ía
La protagonista de la película, Tessa Ía González Norvind, hija de la actriz Nailea Norvind, reconoció que le costó encarnar a Alejandra, pues le movió sentimientos que no pudo explicar. “Para mí sí hubieron algunas escenas que me costaron un poco de trabajo, en general, darle vida a un personaje que pasa por situaciones tan fuertes es difícil. Aunque separas la realidad del trabajo, terminas viviendo las experiencias. Una (escena) es a quien finalmente le terminan cortando el pelo y metiendo pastel en la boca. Pero hubo una situación en la que sí acumulé mucha angustia, fue en la escena del corte de pelo, pero no fue el cabello, fueron otras cosas”.
Por su parte, Gonzalo Vega Sisto, hijo del actor Gonzalo Vega, resaltó la buena comunicación y camaradería que lograron hacer con todo el equipo de la película. “Es lo primero que hago, no había hecho nada anteriormente, imaginé que iba a ser más difícil, pero todos hicimos un gran equipo, cosa que al final nos ayudó en mucho y se fueron dando las cosas de manera natural”.
FRASE
"Mostré un ejemplo de cómo una niña empieza a ser acosada y a lo que llega; hacer ver que el bulliyng tiene consecuencias más fuertes "
Michel Franco, cineasta.
Es la trama con carácter universal la que le ha abierto las puertas del mundo a Michel Franco, quien en mayo pasado presentara su segunda producción en Cannes y regresó a casa con el premio Una Cierta Mirada en las manos, no sin antes haber conquistado a la crítica y la prensa extranjera. Y la cosecha de reconocimientos suma, entre otros, el representar a México en la carrera por el Oscar y el premio Goya el próximo año.
La película, que finalmente llega a las salas mexicanas este 19 de octubre, narra la relación entre Roberto (Hernán Mendoza) y su hija Alejandra, de 17 años (Tessa Ía González Norvind), quienes ahora deben enfrentar la vida como viudo y huérfana, respectivamente. Encarar el proceso de duelo los obliga a abandonar su residencia en Puerto Vallarta para radicar en la capital del país, y es en este vórtice de emociones donde se siembra la semilla de la incomunicación y comienza el deterioro emocional de la adolescente al enfrentarse al bullying de sus compañeros en la nueva escuela.
Una mirada dentro
El director Michel Franco señaló que el tema de la violencia escolar no era lo prioritario al momento de filmar Después de Lucía, sino que tomó fuerza conforme el desarrollo del rodaje. “A veces no queremos aceptar la realidad y supongo que para los padres de familia es difícil percibir este tipo de circunstancias, tengo el dato de que cuatro de cada 10 niños sufre de acoso escolar; no sólo eso es lo que se aborda en la película, también los adolescentes, en la cinta, consumen drogas, alcohol y tienen relaciones sexuales, y muchas veces no nos queremos dar cuenta de la realidad”.
El filme ha logrado conmover a cada audiencia que la ha recibido en los festivales internacionales, por la crudeza con la que los jóvenes son capaces de dirigirse en la vida y las consecuencias que alcanzan. “Lo que más me interesa de la película es el luto personal, la presión y falta de comunicación de los personajes, el acoso llegó después y de manera natural, por lo que se fue comiendo un poco a la película, eso es lo que ha llamado más la atención”.
Fue difícil darle vida a Alejandra: Tessa Ía
La protagonista de la película, Tessa Ía González Norvind, hija de la actriz Nailea Norvind, reconoció que le costó encarnar a Alejandra, pues le movió sentimientos que no pudo explicar. “Para mí sí hubieron algunas escenas que me costaron un poco de trabajo, en general, darle vida a un personaje que pasa por situaciones tan fuertes es difícil. Aunque separas la realidad del trabajo, terminas viviendo las experiencias. Una (escena) es a quien finalmente le terminan cortando el pelo y metiendo pastel en la boca. Pero hubo una situación en la que sí acumulé mucha angustia, fue en la escena del corte de pelo, pero no fue el cabello, fueron otras cosas”.
Por su parte, Gonzalo Vega Sisto, hijo del actor Gonzalo Vega, resaltó la buena comunicación y camaradería que lograron hacer con todo el equipo de la película. “Es lo primero que hago, no había hecho nada anteriormente, imaginé que iba a ser más difícil, pero todos hicimos un gran equipo, cosa que al final nos ayudó en mucho y se fueron dando las cosas de manera natural”.
FRASE
"Mostré un ejemplo de cómo una niña empieza a ser acosada y a lo que llega; hacer ver que el bulliyng tiene consecuencias más fuertes "
Michel Franco, cineasta.